* Su visita a Venezuela causó furor desde antes de llegar a Maiquetía, pero en el país descubrió su lado humano, llorando al pensar en su madre, lamentando no ir más al colegio de los hijos y jugando golf. Conversamos con ella el día de su llegada.
Es conocida por descolocar a
grandes mandatarios con una pregunta que no esperaban, que no fue editada ni
pautada con los jefes de prensa, y es lo que la ha distinguido en sus veinte
años de carrera en CNN. Con entrevistados como los exmandatarios de Cuba y
Chile, o los actuales de Venezuela y Colombia, sus reportajes desde Oriente
Medio o siguiendo el décimo aniversario del atentado a las Torres Gemelas el
pasado 11 de septiembre de 2011, que reportó en vivo hace diez años, o las
elecciones presidenciales en EEUU, le brinda una óptica incisiva y minuciosa,
que también le ha granjeado simpatías entre sus seguidores con quienes
interactúa en Twitter sin discriminar si los comentarios son de respaldo o
rechazo, reflejando esa visión de 360 grados que gusta de ofrecer en sus
reportes.
Exreina de belleza, Patricia Janiot fue
Miss Colombia Mundo en 1983, y tras recibir múltiples ofertas de canales de
televisión, se lo tomó en serio, y en lugar de brincar sobre el mejor postor,
abandonó sus estudios de dibujo arquitectónico para aprender locución, y como
sus profesores la auparon y animaron por su desenvolvimiento, se matriculó en la Escuela de Periodismo, lo
que la llevó a ser ancla de noticieros durante dos años en su natal Colombia y
más tarde durante seis años en Univisión. “Yo soñaba con ser escenógrafa”. Recomienda
a las Misses no hacer de su triunfo o paso por los concursos el eje de su vida
a futuro: “Es como querer basar tu destino en lo que viviste un año fuera de tu
país”.
Hija de Zunilda Martirena y
Roberto Pablo Janiot, exjugador de fútbol del Atlético Bucaramanga, ambos
argentinos, Patricia rememoró con ojos húmedos la entrevista que le hizo el año
pasado a su mamá por el Día de las Madres que se recordó durante su rueda de
prensa y en ese miércoles por la noche María Elena Lavaud la sorprendió con una
llamada telefónica de su mamá en su programa “En privado” en Globovisión
reafirmando que cambiará sus cuatro largas visitas anuales a Colombia por seis
u ocho más en corto, sólo para ver más a sus padres.
Se casó con el arquitecto
argentino Miguel Yenos, quien era su novio cuando ella decidió probar en CNN en
una visita que le hacía en Atlanta, y con quien ahora casados tiene dos hijos
adolescentes, Tábata y Tadeo, de 16 y 14 años. Presidenta y fundadora de la Fundación Colombianito,
dedicada a mejorar la vida de los niños afectados por la violencia en Colombia,
usa sus mañanas cuando sus hijos están en el colegio para esa labor, los recibe
al llegar del colegio y se va a trabajar. “En eso tengo celos de mi esposo, que
puede ir siempre a las reuniones de la escuela, lo cual lamento y me duele,
pero todos mis fines de semana los paso con ellos tres”.
Cinco minutos
Cerca del mediodía pudimos
conversar brevemente con Janiot, quien atendió a cada uno de los medios de
comunicación que lo solicitaron. Tras aclarar que venía a jugar en un torneo de
golf en el Country Club de Caracas por los 15 años de CNN, tender puentes
comunicativos con los dirigentes y jefes de prensa del gobierno para pintar la
pantalla de CNN “de más rojo-rojito”, como bromeó, y de venir a hacer el
capítulo local de un reportaje sobre crisis carcelaria en Latinoamérica que
pasará también por México y Honduras con otros periodistas, desmintió también
que viniese a hacer un postgrado de “La Venezuela Post-Chávez”.
Así que pudimos preguntarle sobre otros temas.
Tras entrevistar a Laura
Chinchilla, Dilma Rousseff y Cristina Kirschner, presidentas de Costa Rica,
Brasil y Argentina, visto cómo las mujeres blogueras y protestantes fueron
protagonistas en la
Primavera Árabe y el ascenso de Hillary Clinton como
Secretaria de Estado en sus reportajes, Patricia asegura que el verdadero
cambio se dará cuando se ceda el liderazgo a las féminas, y éstas como madres
no críen hijos machistas, sino que respeten, valoren y acompañen a la mujer.
“Somos quienes inculcamos los valores a las futuras generaciones”.
“Los hombres deben cuidarse
porque las mujeres estamos tomando el mundo. Esta presencia de la mujer en
todos los estamentos, demostrando no sólo que lo podemos hacer mejor, sino que
además de ser mujeres empleadas podemos ser empresarias, estar en puestos de
dirección. Las mujeres tenemos más conciencia social, revisando la historia
hemos estado en los más importantes cambios en el mundo. Y como madres, hemos
criado a los hombres que también lo han hecho”.
Hija de argentinos y con un
esposo de la misma nacionalidad, su relación con la comunidad y costumbres del
país austral son cercanas, pero es a todas luces una colombiana. “Mis padres me
permitieron vivir el país en el que había nacido, no me impusieron nada, y tuve
amigos, escuela y vacaciones como cualquier niña colombiana. Argentina es mi
segundo país, adoro la carne y el fútbol, lo que aprendí en casa”. El Pibe
Valderrama despierta sonrisas y cariño, un personaje muy estimado en su
familia. “Mi papá me dice: creciste como colombiana pero me diste el gusto de
casarte con un argentino” dice jocosamente.
Con la experiencia de haber
entrevistado al presidente Álvaro Uribe y al actual mandatario Juan Manuel
Santos, Patricia revela un conocimiento de la política local colombiana cuando
quise saber su opinión sobre Sergio Fajardo, un catedrático y matemático que
logró ser alcalde de Medellín de 2004
a 2007, reduciendo dramáticamente los índices de
violencia con políticas de educación e inclusión en los barrios más pobres y
violentos, y que actualmente es el Gobernador de Antioquia hasta el 31 de
diciembre de 2015.
“Él ha demostrado que sí se
pueden ofrecer resultados en una gestión pública sin compromisos partidistas,
sin clientelismo, rodeándose de los mejores para este trabajo. Es uno de los
ejemplos de los que nos sentimos más orgullosos los colombianos porque ha
demostrado sensibilidad social, ha dado relevancia al poder de la educación, de
la independencia política, y de los frutos que da enseñar a ser mejores
ciudadanos”. Y hace un vaticinio esperanzador: “No tengo dudas de que Sergio
Fajardo será presidente de Colombia eventualmente. No en el próximo período,
sino en el siguiente, ¿pero qué son diez años en la política con tanta
dinámica? Podría ser en sólo cuatro”, lo dice sin jamás dejar de sonreír
afablemente en la conversación.