Lo confieso, no sólo por haber vivido dos años en Ámsterdam, tengo una debilidad por el metal sinfónico holandés. Me encanta esa idea de "La Bella y La Bestia" que combina voces guturales con sopranos, música sinfónica con guitarras distorsionadas, la combinación que incluye incluso algo de pop, música electrónica y fantasía con tristeza goth y ritmos pesados.
Y en 2023 estoy sintiendo una mayor afinidad con este género que además de crear atmósferas épicas con orquesta y coros, también puede ser alegre y hasta entusiasta. Digamos que me sirve para matizar la pesadumbre del post-black metal, que a veces lo siento demasiado denso para algunos momentos.
Además, después de ver Épica en mi primer Rock Al Parque en Bogotá 2022, tengo más ganas de probar de esta "lekker muziek" hecha en Países Bajos.
En el caso de Delain, quizás de las más suaves de este espectro, pero hijo del tecladista Martijn Westerholt (ex-Within Temptation y también en la sinfónica no metalera Eye Of Melian) podemos escuchar tres adelantos de su disco, que saldrá el 10 de febrero: Moth To A Flame (la más pop y donde aparece Rob van der Loo de Epica, también exintegrante de Delain), Beneath y The Quest and the Curse, en la cual suenan growls de uno de los nuevos miembros, el cantante Ludovico Cioffi, de la banda italiana de death metal sinfónico, Nighland.
Y hablé de sentimientos positivos, en colores cálidos, de celebración, porque justamente es eso lo que -a pesar del título del nuevo álbum- parecen asomar los comandados por Martijn. Porque decirles holandeses es injusto, considerando que ahora la nueva cantante, Diana Leah, viene de Rumania, aunque ha vivido la mayor parte de su vida entre Canadá e Italia y del mundo de la música electrónica trance.Así que con canciones entusiastas, esperaremos lo que trae la ahora más internacional banda.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Habla, sé serio y organízate.