26 Leyes por el pecho, las Olimpiadas como cortina de humo y Leopoldo súper-héroe

Una de las cosas que más recuerdo de haber vivido en la catalana Barcelona es la afición general por la lectura. Cada vez que subía al metro, todos sacaban su respectivo ejemplar. Jóvenes, mujeres y viejitos. Desde Harry Potter hasta lo nuevo de Isabel Allende, pasando por Quién se robó mi queso o el más reciente de Boris Izaguirre, cada quién aprovechaba los minutos de traslada para comerse algunas páginas.

En Venezuela desde el 2006 vivimos un boom literario alrededor de nuestros humoristas y periodistas, así que todos leen ahora a Laureano Márquez, algunos a Carlos Flores y Gabriel Torrelles, otros incluso a Benjamin Rausseo y los más visuales a Rayma y Zapata. Para los políticos, hay toda una ramo de donde elegir, los que revelan quién mató a Danilo, porqué Hugo es nuestro presidente y los que destripan al socialismo, mientras biografías de El Ché o Fidel, se siguen vendiendo como bestsellers.

Aunque casi nadie lee en Venezuela, el uso de Internet sigue creciendo como el mercado de celulares ya no puede más. Por eso, después que nos dolieron los ojos leyéndonos la Reforma Constitucional, ahora nos lanzan 26 leyes -con 16 más para meternos miedo- que la oposición nos advierte -como adivinando- que son el contrabando ilegal que la doña Cecilia Sosa y otros voceros aburridísimos nos han dicho que planea el Hugo, echo el loco, para meternos como sea la Reforma. Así que si te las quieres leer, aquí están Las 26 leyes de la Habilitante.

Estas nos las lanzaron como strike el 31 de julio, último día de los súper poderes que la AN le dio al Comandante, y que como buen venezolano, nos clavó mientras nos gastábamos la quincena, aún enratonados por el 24 de julio y riéndonos del ridículo del desfile del 5 de julio vía email, mientras VTV y TVES se preparan para pasarnos la Olimpiada con el sentimentalismo esperanzador de la Vinotinto hacia Sudáfrica 2010, gracias a los 109 héroes deportivos que van a la cita deportiva, sin posibilidades de escuchar: se va, se va, se va.

Por otro lado, ¿será que creen que nos meterán miedo y flojera de leérnoslas porque son muchas y al final son puro bulto? Eso parece al revelarse que la Ley de Bancos y otras instituciones financieras sólo tiene cambio en un artículo. Claro, uno nada inocente: la compra de cualquier "medio traslativo de propiedad sin necesidad de oferta pública". Te lo compro aunque no lo vendas, viva la liberté. ¿Reforma de contrabando?

Antes de eso, Hugo andaba por Guayana totalmente eufórico, viendo como se agolpan los botellones socialistas de esperanza Barrio Adentro del PSUV, y habló de relanzar la reforma en Diciembre tras el triunfo del 100% de las alcaldías y gobernaciones en las regionales del 23N, lanzar el "bicho" -Satélite Simón Bolívar- y contar que un día antes, en un amistoso de softball con sus ministros y allegados, ponchó 5 veces a ¡Diosdado! -voz en cuello- y 3 veces a Aristóbulo, para recordar que quién no sepa lo que es Revolución, que vea una foto de él riéndose.

Estaba feliz por adelantado del otro ponche que le metería a Leopoldo López, el Chapulín Colorado de la oposición de ahora, al dejarlo inhabilitado vía TSJ -plasta/bosta de vaca- pero sin imaginar que éste, ahora más alebrestado y crecido que nunca, anunciara que apoyará a un nuevo candidato que se llevará por delante a quien sea en Libertador y hasta se rumora podría ser Ismael García, aunque es Stalin González el que se acerca al ser el ungido de la unidad.

¿Para qué querrá entonces Hugo lanzar otra reforma si estas 26 Leyes le dan lo que antes no se pudo concretar por más esfuerzos de Tibisay Lucena? Lo mismo de siempre: reelegirse, ahora que Leopoldo López parece fuera de su camino. Por ahora, Comandante. Recuerde que usted también vino desde la oposición sin cargo. Mientras tanto, sólo nos queda leer las nuevas leyes mientras ligamos las medallas de oro para los criollos, y tratamos de pararle a las inscripciones definitivas de los llamados candidatos unitarios.

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