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08 septiembre 2025

¿Cómo votar en la final del Mundial de Desayunos de Ibai en TikTok, Youtube e Instagram? (Links)

El lunes 8 de septiembre de 2025 a la 1 de la tarde de Venezuela empezó la final del Mundial de Desayunos del streamer español Ibai Llanos.

La arepa pepiada (rellena de ensalada de aguacate, mayonesa y pollo) rodeada de un pabellón criollo se enfrenta al pan con chicharrón de Perú.

Acá te dejo los enlaces para votar en los comentarios, por Venezuela en cada red social y no te confundas. Es importante saber que el voto no es escribir que votas por Venezuela ni darle clic a cualquier comentario ni votar en una vídeo que no sea de Ibai Llanos. Debes entrar en su vídeo, dejo los enlaces abajo, y darle like a los comentarios que él dispone para votar.

En TikTok, el vídeo está aquí y votas en el comentario de Ibai (que tiene la marquita azul) que dice VENEZUELA https://www.tiktok.com/@ibaillanos/video/7547783016224165142. Para las 3:30 PM Perú llevaba 1,2 millones de votos y Venezuela 800 mil.

En Youtube, el vídeo está aquí https://www.youtube.com/shorts/v6UTx3enwpE. Haz clic en la sección de comentarios, es el cuadrito debajo de la manito con el pulgar hacia abajo.

Venezuela iba ganando 287 mil a 249 mil votos.


Y en Instagram, votas aquí https://www.instagram.com/p/DOWdW26DJr3/?hl=es-la hacie3ndo clic en la descripción del vídeo. Acá, Venezuela tenía 936 mil votos versus 864 mil.

Al publicar esta nota entonces, Perú tenía 2 millones 313 mil votos y Venezuela tenía 2 millones 23 mil.


05 junio 2024

Luchar contras las narrativas: el gran reto periodístico y ciudadano

Uno de los retos más arduos para quienes trabajamos como periodistas y verificadores es luchar contra las "narrativas". Estas estrategias, que no se basan sólo en piezas informativas o contenidos en línea, apelan también a prejuicios y creencias. Y en el caso de Venezuela, hay que decirlo, se apela a un clasismo y lucha de clases, que está bastante arraigada en nuestra cultura.

Pensemos en la más reciente narrativa exitosa -porque muchas fracasan por los voceros, por las formas o los tiempos- que se implementó: "Venezuela se arregló". 

Esta fue especialmente exitosa para la diáspora venezolana, aunque no tuvo casi ninguna repercusión dentro del país. Esa narrativa de una nueva prosperidad que dejaba atrás el año horrible del 2017, cuando se dio el mayo pico de migración, de escasez, represión política y caminantes por las vías de Latinoamérica.

Esta narrativa expandía la evidencia de un aumento de nuevos negocios y emprendimientos, el regreso del abastecimiento de alimentos y medicinas e incluso mostraba que la pobreza había bajado y el PIB volvía a crecer. Incluso el estudio ENCOVI habló de esta recuperación.

Una allí una sub-narrativa: que la gente se estaba devolviendo masivamente. El gobierno habló de 4 millones de retornados en la ONU, luego Maduro dijo que "casi un millón" desde 2020 y más tarde el Canciller dijo el único dato que ha sido sostenible con otros estudios: 300 mil personas.

Incluso hubo quienes vieron fotos de mucha gente cruzando el Puente Simón Bolívar, que une a Cúcuta y Villa del Rosario en Colombia con San Antonio en el Táchira, como evidencia de este regreso "masivo".

Pero este puente, que fue reabierto en 2022 con la llegada de Petro a la presidencia de Colombia, está en la frontera más activa del mundo, en la que se mueven cientos de miles de personas a diarios de ida y vuelta, por quienes viven en un lado pero estudian, trabajan o compran en el otro, cruzando hasta varias veces al día. Y antes lo hacían por trochas. 

No eran miles devolviéndose, era haciendo lo que siempre ha funcionado en esa frontera: ir y venir para comprar y vender. Incluso hay un documento que permite este "tránsito pendular" y que se hizo muy popular en Venezuela, la vendían en locales cercanos al SAIME cuando uno iba a sacarse el pasaporte.

"Yo conozco varios panas que se devolvieron, ahora la pasan bien allá". Fue una narrativa de TikTok, de anécdota, de fotos indignadas de la desigualdad, por los Ferraris y los locales hermosos, por la gente paseando en Margarita, Gran Sabana y la nostalgia, pero que también tuvo su ángulo clasista.

Es el mismo dilema, una y otra vez, de las colas de Zara, de la gente en una playa o de las presuntas señales de recuperación económica que puede costear, una pequeña porción de la gente, pero se obvió de ese cálculo los cientos de presos políticos, las personas muriendo por falta de medicamentos para trasplantados o que hay comida y dolarización, pero la gente no gana lo suficiente.

Otro estudio lo definió mejor: la gente volvió a probar suerte porque le fue muy mal en los países de acogida por falta de acceso a documentos, servicios o buenos salarios, porque extrañaban mucho a su familia o por diversas razones emocionales, profesionales o económicas, pero mientras creíamos en que "Venezuela ya no está tan mal", el Tren de Aragua desarrollaba una red de contrabando y trata de personas por toda Latinoamérica para expandir sus actividades mientras que al norte de Colombia otra red, el Clan del Golfo, hacía lo mismo para aprovechar la remigración: el paso por el Darién.

Y se rompe la burbuja de la narrativa: medio millón de venezolanos al año están pasando por el Tapón del Darién, una selva inhóspita, llena de delincuentes y abusos, por el que hasta hace pocos años la mayoría de venezolanos no sabía que existían o que no era tan difícil. Narrativas, Tiktok, cuentos de Whatsapp. Un amigo me dijo.

Estas narrativas, con base en el clasismo: que se concentró en quienes se devolvieron a vivir en la playa o quienes abrieron negocios exitosos, ignoró de nuevo a la gran mayoría: las familias con tres hijos que se devolvieron por la xenofobia de Perú, porque pasaron hambre en Colombia, porque nunca lograron vivir bien en Chile. Porque se les enfermó la mamá en Caracas, se les murió un hijo en Maturín, porque la pandemia los dejó en la calle y volvieron "donde no pagamos arriendo".

Estas narrativas, con base clasista, me recuerdan a cuando culpamos a los raspacupos de la crisis, en lugar de a los corruptos. Y antes cuando eran los bachaqueros, y no el control de precios, las expropiaciones. Incluso fue popular eso de "venezolano jode a venezolano" al principio de la migración masiva.

Lo peor es que las narrativas se basan en creencias, en memes, en miedos, en un instinto de protección, pero no en evidencia. Así en Venezuela -y acá me voy a arriesgar duro- son populares otras narrativas desinformantes como la "ideología de género" e incluso he visto cómo varios contactos están felices de encontrar "problemas ecológicos" en los automóviles eléctricos, como si producir carros de gasolina no implicara minería, explotar petróleo, gastar energía y además, emitir gases contaminantes. La narrativa hacer creer que estamos cambiando bosques por carros eléctricos, en vez de petróleo por energía solar.

Y sí, es difícil encontrar el origen de estas narrativas.

Por ejemplo, es difícil pensar cómo Rusia ha sido suspendido de distintos eventos deportivos, por su actuación contra la población LGBTIQ+ en las Olimpiadas y en Mundial de Fútbol, incluyendo sus propios atletas. O cómo es ser homosexual en China, Irán o Bielorrusia. Puros "panas" conocidos. 

Más fácil es juzgar a mujeres trans (¿por qué nunca a hombres trans?) por memes de Canadá, de España, de Irlanda, por TikTok, por lo que "leo" de otros, por tradición, por respeto a "lo normal". Y nos olvidamos del chamo que quemaron vivo en Santa Rita, Aragua. O de Shirley, la mujer trans que vive en una plaza en Maracay, de los femicidios, de los asesinatos por razones de género y que ser lesbiana u homosexual en Venezuela es un infierno de prejuicios, de burlas, de no tener acceso a lo más básico, que estamos perjudicando a gente, otra vez, pobre o muy pobre, porque en redes sociales vimos que son "víctimas del lobby gay" con videos de Austria, EEUU o Irlanda.

Y así vamos similarmente el Cambio Climático (y Greta Thundberg) o alabando a ultranacionalistas, ultra derechistas o extremistas, porque hablan mal del socialismo. Me recuerda a la película La Ola, en que un profesor trata de demostrarle a sus alumnos que el regreso del nazismo es más fácil de lo que ellos creen, hasta caer en una espiral en que él mismo se vuelve neonazi, se lo cree hasta el final y funda un movimiento.

Cuidado con las narrativas, no son la realidad. 

21 febrero 2024

Machos Alfa, una comedia española sobre hombres deconstruidos de los creadores de Aquí no hay quien viva (+actualización)

¿Qué es ser un hombre? Por oposición a su madre no quiere ser un bebé y por oposición a las mujeres, no quiere ser afeminado. Así empieza el curso de "deconstrucción de la hombría" a la que acuden cuatro amigos, convencidos por uno de ellos. Atónitos ante el "gurú", se debaten entre abandonar, refutar, aceptar a regañadientes y abrirse a nuevas experiencias. Así es Machos Alfa, una serie española de Netflix que me ha resultado desternillante, ocurrente y aleccionadora pero con buen rollo. 


Los cuatro amigos, una vez "graduados" tratan de poner en práctica lo aprendido, creyendo que ya ni son patriarcales, machirulos ni sexistas. Sin embargo, hasta Santiago, quienes los enroló en el taller, se da cuenta de lo difícil que resulta. Y es que deben deconstruir desde el lenguaje más sencillo y las expresiones más cotidianas hasta examinar más profundamente sus relaciones emocionales, laborales y sociales. Esto los lleva a situaciones alocadas con sus parejas, exparejas, jefas, empleadas, potenciales parejas sexuales e hijos. Incluso sorprenderse porque los padres swingers de uno de ellos y que asumir nuevas actitudes siendo cuarentones es un reto más fácil de decir que de hacer.

"Es mejor la infidelidad de toda la vida, escondidos, que esto de la pareja abierta, que es dificilísimo" dice una de las protagonistas, cuando se da cuenta que no se pueden sentir celos ni inseguridades "como siempre" con esta solución aplicada a su crisis matrimonial. Así que todos se dan cuenta, más rápido que tarde, que es más sencillo creerse deconstruido que saber cómo comportarse en cada situación social, incluyendo la posibilidad de ser un "macho alfa" acosado sexualmente en el trabajo por su jefa.


Sí, es cómica
De forma similar a P#t@s Redes Sociales, estos temas peliagudos son asumidos desde el humor y de nuevo, como dije en Ojitos de Huevo, de forma más graciosa que esta crítica. En Machos Alfa se destacan especialmente los diálogos hilarantes -en que se van vigilando unos a otros para no repetir ideas machistas- y un examen del papel de las nuevas tecnologías de comunicación. Así se revisan temas más clásicos como la amistad masculina y las diferencias entre clases sociales. 

"¡Patriarcal!" les grita Santi cada vez que, casi de forma inconsciente, aún hacen comentarios sexistas, a veces sólo por costumbre. Y como en cada grupo con chistes internos, esto se devuelve, porque el grupo de amigos va aprendiendo.

Mientras avanzan los capítulos, y mucho más en la segunda temporada, la comedia aborda distintos ángulos y conflictos entre influencers, la cultura de cancelación y las aplicaciones de citas por Internet. Luego llegan a los prejuicios sexuales que tenemos por las personas con discapacidad, la heterocuriosidad, el intercambio de parejas, el acceso a la pornografía y la educación sexual de los niños.

Hay espacio para todo, por ejemplo, que existan tantas dudas para el consentimiento sexual o cómo actuar cuando un hombre gay quiere ser tu nuevo socio o amigo. De mis cosas favoritas en la serie es cuando los amigos se llaman por cámara de forma grupal, las reflexiones jugando pádel y cómo a pesar de criticarse, insultarse y hasta molestarse tanto para irse de una reunión, tienen una amistad que resiste cualquier cosa, que no se rompe.

Así un personaje puede confesar que ser un nuevo hombre es más difícil de lo que esperaba, que lo está intentando y que está fallando, pero también comete errores garrafales como tratar de evadir una responsabilidad diciendo que se siente mujer, lo que lleva a tocar la lucha trans, de forma tragicómica.

Producción
Los creadores son los hermanos Alberto y Laura Caballero, conocidos por la serie de culto Aquí no hay quien viva. En Machos Alfa vuelven a producir, escribir y dirigir, así que si te gustó la primera, acá hay garantías de situaciones cotidianas tratadas desde el humor negro sin dejar de hacer reflexiones no tan obvias, como que los hombres también pueden ser víctimas del patriarcado o que las mujeres pueden defender ideas tradicionales sexistas. Y ya puedes imaginar la calidad humorística de los diálogos.

Los cuatro protagonistas masculinos son Gorka Otxoa como Santiago "Santi" Peralta, un divorciado con una hija de 17 años; el mítico Fele Martínez (Tesis y Abre los ojos de Alejandro Amenábar, Los amantes del Círculo Polar de Julio Medem, Hable con ella y La mala educación de Pedro Almodóvar) como Luis Bravo, un policía de tránsito casado, calvo y con dos hijos pequeños; Fernando Gil (La que se avecina, readaptación de Aquí no hay quien viva) como Pedro Aguilar Prieto, un productor de televisión que se ve desplazado laboralmente por su novia influencer primero y por su jefa después y Raúl Tejón (Vis a Vis; La que se avecina) como Raúl Camacho Sanchís, un empresario gastronómico que le es perennemente infiel a su novia.

Junto a ellos están Raquel Guerrero (La que se avecina) como Esther, esposa de Luis; Paula Gallego (Vis a vis: El oasis y Paquita Salas) como Álex, hija de Santi; María Hervás (Paquita Salas, La que se avecina) como Daniela, novia de Pedro y Kira Miró (Paquita Salas, La que se avecina) como Luz, novia de Raúl. Hay que destacar el debut de la actriz peruana Karol Luna, que agrega su propia capa de estereotipos, de los cuales reírse y reflexionar con humor negro.

Actualización 2025: tercera temporada
El viernes 10 de enero se estrenó la tercera entrega (y no última porque ya se anunció que habrá cuarta y adaptación en Francia, Italia, Países Bajos y Alemania) de Machos Alfa introduciendo nuevas temas una vez que sabemos que los cuatro amigos están deconstruidos. Los roles de géneros intergeneracionales (del abuelo de 84 al adolescente de 11), la "anarquía romántica" y las "almas libres".

Temas muy polémicos y difíciles como los incels, la transexualidad (y la educación sexual integral) entre los niños, el amor a la tercera edad, las "almas libres" que no se quieren casar y el amor lésbico son tratados de nuevo con humor, picardía y diálogos inmejorables, en la que entra también personajes que encarnan que en esta sociedad contemporánea también hay tradicionalistas y conservadores orgullosos, que se quieren casar para toda la vida, que ponen su religión por encima de sus impulsos e incluso la interpretación del feminismo que vemos en redes sociales y las conversaciones de sobremesa: quejas porque la liberación te quita cosas preciadas como el Día del Padre, la búsqueda de "la media naranja" con compromiso para toda la vida. 

Lo dice Santi en un momento: "quiero contigo todo, matrimonio, tener una hipoteca, hijos y divorcio para pelear luego por la casa". Además, hay conflictos "de toda la vida" como la diferencia de edad, y su interpretación moralista según si quien es mayor es el hombre o la mujer. Hay también zonas grises que son exploradas con ingenio, ¿en una relación de dos mujeres que se pelean, quién se arrastra? se pregunta Esther y claro, ¿puede una mujer ser agresora sexual si le toca el culo a un hombre joven en una discoteca estando ebria?

La serie se desarrolla en un metahistoria en que Machos Alfa también es la serie que está produciendo Pedro, quien se enfrenta a una Daniela embarazada pero sin interés en volver con él, que se buscar un "artista" de 10 años menos que vive en un vans como nueva pareja, a la niñera Patricia también a punto de parir y con una nueva jefa que le hace "mobbing", tanto que aprueba una serie llamada "Acosado" para reírse de su denuncia de acoso sexual contra su anterior jefa. En fin, deconstruidos y confundidos, me pareció encontrar guiños a Little Miss Sunshine, en que se explora el suicidio, el amor homosexual no correspondido y la ternura infantil como ingredientes. 

En esta temporada entra como co-protagonista la actriz hipano-estadounidense Paloma Bloyd como Irene, una periodista y escritora feminista que le pide a Santi hacerse pasar por un incel en una reunión presencial como parte de su investigación para un libro. En el primer capítulo sale la actriz de teatro venezolana Clairet Hernández, quien también apareció en Sky Rojo, de prostitución, venganza y persecución de los creadores de La Casa de Papel y Vis a Vis.

20 febrero 2024

Reseña TV: P#t@s Redes Sociales, un dramedy mexicano que une la nostalgia del dial-up y la TV abierta con la guerra de likes de los influencers

P#t@s Redes Sociales es una serie mexicana de comedia que reflexiona sobre la evolución histórica del estrellato en Internet con temas muy serios como el capitalismo de la atención, la salud mental, la aceptación del cuerpo y la explotación de la mujer con un ingenio humorístico realmente refrescante. Temas obvios desde un punto de vista que no tiene que ser satírico sino risible desde las contradicciones del ser humano, el regreso de ideas viejas que sólo cambian de forma pero no de fondo con la tecnología y el poder de las viejas generaciones que cambian los focos por el detrás de cámaras.


Todo comienza con una youtuber que envejeció frente a las pantallas (Amanda), que pasó de un gran fandom a no saber qué contenidos producir para seguir siendo relevante, que es medio hermana de una influencer jovensísima que habla de moda, salud y tendencias sin tener ni idea (Vicky Moo). Ambas están rodeadas de todo un ecosistema que une lo peor de la telebasura del ayer, con managers y productores con décadas de experiencia, con la entusiasta inexperiencia de amigos/familiares/empleados que saben mucho de usar tecnología y poco de hacer negocios.

En lugar de hablar solo de Tik Tok, la serie recurre frecuentemente a la dulce nostalgia por los albores de Internet, la incomprensión familiar de "amar, trabajar y vivir" de Internet y la confusión de ser un adolescente ayer y hoy, viajando del dial-up a la esclavitud del celular. 

Como detonante de este "dramedy" de 2023 está la filtración de fotos íntimas de Amanda (que da para muchos chistes conocidos pero refrescados) que lleva a la competencia por el amor paternal y de las masas de internautas, así como echar una revisión a la vergüenza derivada de la pérdida total de intimidad que en la era de Internet te pueden hacer trágicamente famoso en forma de memes.



Todo vuelve, no sólo las modas, sino que lo mejor que le puede pasar a un influencer es ser invitado a un reality de televisión abierta, en la que ya no estará publicando stories ni haciendo lives. Así que en P#t@s Redes Sociales, se arma una gran competencia para ser la próxima estrella televisiva, entre sensaciones de Internet, antes de terminar en el olvido 2.0. 

La serie asume, desde la ironía, el sarcasmo y el enredo, más divertidas que mis reflexiones de bloguero, sobre cuánto pensamos en quienes son las personas detrás de los chistes de Internet de los que nos reímos. El ángulo es definitivamente adulto, no es una serie juvenil. Es sobre la condena sobre la mujer infiel, las críticas al cuerpo ajeno, la explotación del morbo y la construcción de noticias sobre algo que no lo es: la farándula en línea, las "modelos" de Instagram.



P#t@s Redes Sociales es una creación de Jorge Ulloa y Natalia Valencia, artífices de la serie de sketchs cómicos latinos Enchufe.tv, que para dar ese choque generacional incluyó a Bárbara Torres (La Familia P. Luche) como manager de Amanda y a Jorge Abello (Armando de Betty, La Fea original) como productor de televisión. El medio es el mensaje, y el casting da un meta-mensaje. Porque Ulloa y Valencia también actúan en la serie.

La serie está protagonizada por Paulina Gaitan como la youtuber "Hola, Soy Amanda", a quien someten a varios cambios estéticos (aparente más peso y edad) para mostrar el reto de ser una estrella audiovisual sin estar en los cánones de belleza de los filtros, las operaciones estéticas o la nueva salud vegana. A ella la puedes recordar por Capadocia, Señora Acera, Sr. Ávila y Narcos (La Tata).

Vicky Moo es Azul Guaita (Clase 406, Rebelde 2022) mientras Hernán Mendoza (Sr. Ávila, La Dictadura Perfecta, Rosario Tijeras) es César, un contador que abandonó a Amanda siendo niña para irse con su otra familia con su otra hija, Vicky, quien admira a su hermana mayor.


Hay un personaje para cada actor de este ecosistema de la vida, en que no todos estamos en línea o somos importantes pero estamos allí, como cuando se decía "que no tengas una cuenta de Twitter, no implica que no se hable de ti allí". La otra cara de César es Chiri (Jesús Zavala, La Balada de Hugo Sánchez, Club de Cuervos), el amigo de toda la vida que ama a Amanda en secreto mientras ella está absorta en cómo volver a ser relevante en Internet mientras él está dispuesto a lo que sea por ella, aunque tiene novia que quiere que tenga "un trabajo de adulto".

El elenco también tiene a Paco Rueda (La Casa de Las Flores) como un youtuber que habla de televisión y redes; Beng Zeng Wong como el youtuber advenedizo Ricardolorido y Melissa Hallivis como Laura, amiga / productora de Amanda, que hace un papelazo al representar una mujer fanática de las frases célebres como invocación de la autoayuda para los negocios.

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01 abril 2023

Cuando descargas Tik Tok: todo lo que revelas sobre tu cuerpo, tu entorno, tu celular y tu vida sin saberlo pero con tu autorización

¿Saben cuánta información entregas a Tik Tok cuando subes un video? En mis charlas universitarias les digo que tienen información biométrica: cuerpo, color de ojos, cabello y piel, objetos del fondo, cómo tecleas, lo que dices y cómo. Y está en su web:

https://tiktok.com/legal/page/row/privacy-policy/es



Esto significa que Tik Tok no sólo sabe cómo luces, los movimientos que puedes hacer y cómo vives o dónde grabas, sino con los filtros les dices cómo te gustaría lucir (y acá se explica cómo el algoritmo reduce la exposición de personas pobres, negras o con discapacidad).

Como Tik Tok también te dice, pero no lo lees, que tiene datos de tus otras apps, espacio en el celular, acceso a la cámara y micrófono (incluso cuando cierras la app) hace un perfil más amplio que otras redes sociales sobre localización, gustos y características personales.

Y si el usuario es un niño o adolescente, hay muchos estudios psicológicos, como este, que analizan el "uso pasivo de redes sociales" en la salud mental, impactando muy negativamente en la autoimagen, la autoconfianza y la autoestima.

¿Y qué es el uso pasivo de redes sociales? El tiempo que miras una fotografía o video de un perfil que no sigues, al que no le das me gusta ni comentas, pero de esa forma crees que "engañas" al algoritmo. Eso se cruza con geolocalización y horarios...

Es decir, Tik Tok puede saber si los sábados por la noche en tu casa miras ciertos tipos de perfiles o si en horario académico de día ves otros, cuando no estás de verdad usando el celular (porque te bañas o duermes y no se mueve ni hace nada) y todo con tu autorización.

Como dijo Mark Zuckeberg hace unos años: Facebook sí sabe la orientación sexual de alguien o si una relación va a terminar días y hasta semanas antes que los involucrados. De esta misma forma, se teme que Tik Tok pueda saber más de un niño o adolescente que la ha usado por años.

¿Saber más? Esta historia cuenta la "excesiva cantidad de datos" que recolecta Tik Tok de sus usuarios (en inglés).

Este otro reportaje dice que no sólo Tik Tok tiene tus datos biométricos, técnicos y de geolocalización, sino que tiene distintos trackers para compartirlo con terceros y es muy difícil cortar ese seguimiento o saber dónde terminan realmente tus datos.

Y finalmente, un documental de PBS con influencers de la "generación Z" y tik tokers, más expertos, para hablar de los impactos socioculturales y geopolíticos, retos de salud mental, en la voz de quienes saben mejor esto porque la usan a diario.

02 junio 2017

La censura y la muerte

Lamentablemente, la censura de medios y la muerte de venezolanos se han vuelto noticia y evento común en el país. A la declaración de Luisa Ortega de un promedio de 60 homicidios por día durante 2016 ahora se suma los asesinados por fuerzas policiales y militares por protestas, electrocutados por saqueos o por arrollamiento/choques con barricadas. Además de los indirectos por perdigones o asfixia, los que aún no se conocen causas exactas y los torturados cruelmente en calabozos, enjuiciados en tribunales militares o retenidos por la necesidad de fiadores con difíciles requisitos.
Lo oficial, que ya no es monolítico, incluye la película de ciencia ficción del ministro que asegura que ayer capturaron a un paramilitar colombiano que entrenaría a opositores para disfrazarse de GNB para matar manifestantes. Sin embargo, el MP no ha encontrado a los más de 35 imputados uniformados, que estaban infiltrados, sino activos.
Una guerra mediática que incluye las versiones del lamentable y repudiable linchamiento del teniente Subero al asistir al velorio de José Manuel Sosa. Mientras el médico encargado del ambulatorio, Domingo Verde, aseguró que no llegó tiroteado y así lo reafirmó el gobernador Henri Falcón, ahora resulta que el médico admite que no estaba de guardia y no lo vio, que está de vacaciones mientras otros dicen que renunció/fue despedido. El CICPC tendría el caso resuelto, y ya detuvieron a 7 personas aunque esperan tener más arrestos mientras vecinos denuncian que siguen llevándose por las malas a testigos de los alrededores. No hay el mismo esfuerzo policial para saber quién mató al joven que estaba siendo velado.
Algo similar está pasando con el juez Nelson Moncada, asesinado en El Paraíso de varios impactos de bala. Una versión dice que trató de evadir una barricada y el ministro de la ciencia ficción que fue sicariato. Los periodistas de sucesos dicen que le robaron todas sus pertenencias. La cosa se enreda al señalar que fue el juez que investigaba el caso de Bassil Da Costa pero también el que ratificó condena de Leopoldo.
A la guerra de declaraciones y ruedas de prensa, que se suma la de la Fiscal pidiendo aclaratoria sobre las sentencias de la Constituyente, está que las transmisiones son por Periscope o televisión por internet, mientras causo asombro cada vez que tuiteo que -al monitorear- canales nacionales, cada día Globovisión, Televen y Venevisión transmiten más protestas (no sólo en noticieros) de forma más cruda. Antes tímido y ahora dejando ver a los chamos de resistencia, con sonidos de detonaciones y humo de lacrimógenas cubriendo la autopista y la pantalla, con el reportero ahogado o con máscara de gas. El rating perdido es duro de recuperar.
Aún así, hay esfuerzos jurídicos y políticos para defender la labor de los periodistas, mientras cada día hay más "justicieros" que tratan de "descubrir sapos" señalando a quienes llevan años haciendo reporterismo gráfico. Ayer se publicaron chats de Whatsapp montados en La Patilla, que según adelantó Pedro Carreño en Twitter, podría pagar hasta mil millones de bolívares a Diosdado por la demanda contra El Nacional, ABC de España y Wall Street Journal por un reportaje que señala que tienen vínculos con el narcotráfico.
En este enredo hay quienes han atacado reporteros, sin darse cuenta que la censura pasa por los dueños de medios que a su vez son presionados por Conatel de quitarles la concesión o imponer multas millonarias como ya ha enfrentado antes Globovisión e incluso por orden de tribunales el diario Tal Cual. Y el ente administrativo va por más. Ayer Andrés Eloy Méndez, que antes estuvo en la SUNDDE, anunció que preparan un reglamento de redes sociales para usando tecnología "como en China y EEUU" eliminar las cuentas que usando la libertad de expresión llamen al odio o la guerra.
¿Cuál será el criterio? El ente que ha censurado cientos de webs y varios canales de televisión con un gobierno que ha apresado a tuiteros con acusaciones y procesos dudosos. Y no digo que no haya quien no use correctamente las redes sociales, pero el ente no se ha pronunciado contra el uso difamatorio que ha hecho la PNB, el peculado de uso de las cuentas oficiales para apoyar al PSUV o el uso de VTV para atacar a la oposición.
Además, ante los nueve muertos en Barinas durante represión, el ente reaccionó cerrando seis radios. Como cuando Maduro culpó al Hombre Araña y las novelas de la criminalidad, o antes se prohibieron juguetes y videojuegos bélicos porque aupaban la violencia. Y aún así, la criminalidad aumenta por razones más comprensibles: desigualdad, pobreza, falta de servicios públicos,
corrupción, (y frustración y rabia), impunidad, matraca policial, embarazo adolescente, hacinamiento, venta ilegal de alcohol y drogas, y falta de condena pública desde el Estado que los bautizó como "buenandros" permitiendo pranes y megabandas.
Hoy los estudiantes marcharán hacia VTV, que ya se encuentra cerrado mientras anoche en Zurda Konducta dijeron que había impunidad permitida por la Fiscal y que esperan que hoy "no pase nada". Un tip: ni en TVES ni en VTV pasan sucesos (salvo que sirvan para acusar a la "derecha política terrorista en insurgencia armada"). Una tremenda telenovela.