¿En qué bolsa te trajiste la Revolución Espiritual? ¡Qué comunismo! el blog idiota

Hace un tiempo, el presidente continúo y reelegido dijo que aquí tendríamos una Revolución espiritual. Ser rico es malo, Cristo fue el primer socialista y un plan ecologista de cambiar gratuitamente millones de bombillos "ecológicos" fluoresentes para disminuir el consumo de electricidad acompañaron esta premisa. Nuestro nuevo líder no sólo era bolivariano, parecía que hasta era vegetariano.

Habló de trueque, de la unión latinoamericana, de los indígenas, del saber africano y usó muchas palabras progresistas y hippies como comunal y software libre. Estaba en contra del consumismo, del libre mercado, de la economía primer mundista que todo lo compra, lo gasta, lo bota. El presidente se iba a casar en Choroní con una peruana en una ceremonía pemón.

Parecía que en Venezuela reviviríamos un Woodstock 69, todos los días del mundo.

¿Y qué pasó ahora? Algunos afectos al gobierno ironizan con blogs como ¡Qué Comunismo! porque la economía creció un 9%, aumentaron la exportaciones de carros de lujo y la clase media compra más viviendas, mofándose de aquellos que -paranoíacamente, hay que decirlo- dicen que el castrocomunismo viene a comerse a tus hijos y los que sobrevivan serán ideologizados.

Expropiaciones, nacionalizaciones, militarismo, destrucción de la democracia, aplastamiento de la oposición, y ese largo etcétera que ya hemos discutido rascaos y rascándonos, escuchado, leído y hasta machacado en la prensa disidente -golpista-, parecen señales claras del advenimiento de una dictadura, un totalitarismo, que hace pensar que el socialismo del siglo XXI es gato por libre, un chiste de Moncho Martínez, Loco Video Loco.

Precisamente por eso, compañeros socialistas, es que yo me arrecho. No hablemos de Hummers, de diputados con mansiones aquí y allá, del caso Microstar, o los que compran bancos y periódicos como si nada, gozan una bola con CADIVI o se cojen los riales al estilo Cuarta República como en el Central Azucarero Ezequiel Zamora o en cualquier obra pública que se construya por allí; supongamos que ese no es el peo.

Mi arrechera viene de leer una revista llamada DINERO, en su número 240, del 2 de agosto. Veamos como está Venezuela para esta publicación. DaimlerChrisler, aunque mundialmente se están separando, en nuestro país seguirán ensamblando 80 automóviles diarios, mientras planifican un segundo turno de trabajo. ¿Los modelos? Jeep Cherokee, Grand Cherokee y Caliber Dodge. ¡Adiós al materialismo, saluda al ecologismo!

Por otro lado, el BBVA, que fue acusado de haber financiado la campaña de quién-te-conté, dispondrá de un nuevo servicio de retiro de efectivo a través de los puntos de venta en los comercios afiliados. Simple: cómo si fuese a pagar con tu tarjeta de débito (luego también valdrá para las de crédito), y en el negocio te dan tu dinerito con más seguridad, con el aire acondicionado del Sambil y sin tener que arriesgarte a que te hagan un Secuestro Express. ¡Oligarcas temblad, si señor!

Y claro, no podía faltar el romanticismo: El Alba. Este creará algo llamado "trading", que no es más que el intercambio de mercancías entre los socios de esta unión de naciones, a través de las llamadas "Tiendas del Alba" para almacenar y negociar productos de los socios y países terceros mediante el "comercio justo". Justo lo que estaban esperando los vivos de siempre. No huele a azufre, sino a pimentón.

Más y más peroles para comprar y tener, ya que todos tendremos nuestro celular gracias a Movilnet y su plan Consejo Comunal.

No sé si a los panas de ¡Qué Comunismo! esto les parece gracioso porque revierte la tesis disociada y oposicionista que acusa al gobierno de ir hacia el empobrecimiento cubano, más bien demostrando que aquí lo que hay es un Capitalismo de Estado, un clientelismo populista exacerbado, una nueva -o vieja, qué importa- oligarquía e incluso unos nuevos vicios de corrupción administrativa.

Cientos de miles de nuevos automóviles, celulares, franelas, pancartas, banderas, pendones, gigantografías, tarimas, luces, equipos de audio, contrataciones de artistas, se añaden a un planeta que ya no aguanta que usemos tantos recursos, que seamos tan espléndidos, que todo lo gastemos. Imagino que el crecimiento de las mañas neoliberales y capitalistas es lo que motiva tanta risa y sorna en los panas de ¡Qué Comunismo!

¿Quieren reirse de verdad? Les dejo con El Culto y su nuevo avance informativo. Cisneros: "Vamos a vender un Ministerio y dos Misiones".

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