Hagamos como los periodistas "serios": Según el Diccionario de la Real Academia Española, un realista puede ser interpretado como alguien partidario del realismo, alguien ligado a los realistas (como el ejercito español al que combatió Simón Bolívar durante la época de la Independencia) o, que nos interesa ahora mismo: "Que actúa con sentido práctico o trata de ajustarse a la realidad."
Al buscar el realismo, vemos que es: "Forma de presentar las cosas tal como son, sin suavizarlas ni exagerarlas." Eso es como ser distinto a quién siempre ve las cosas emocionalmente, sea para bien o mal, es como ser objetivo, neutral, seco más bien.
Pero de esta forma, mucha gente que es pesimista, se justifica diciendo que no, ellos son es realistas. Esto es, si alguien te dice: no vale, eso es muy difícil de ganárselo, las cosas nunca van a cambiar en este país de flojos o esta universidad/trabajo es una mierda; para elllos es ser realista, ellos ven las cosas "como son".
Y si, lo son, pero realistas como lo fueron los españoles y canarios a quién nuestro Libertador les declaró la guerra a muerte mientras ellos defendían la corona española. Los "realistas" siempre ven el mundo oscuro, negro y sin esperanzas, ellos creen que el mundo es así, y que los demás son sólo soñadores, tontos o más arriesgados que ellos, y que ven las cosas de forma equivocada. A esa gente hay que mandarla a lavarse ese paltó, pendejos.
Un "realista" no es más que alguien que ha decidido no ilusionarse, supuestamente para no deprimirse al no lograr el éxito o para poder decir: ya sabía que iba a fallar. Según estas personas, si pasa algo bueno lo atribuyen a un natural equilibrio cósmico y por eso tampoco se alegran demasiado: Hombre, ¡algo bueno tiene que haber!. Sin embargo, son gente que siempre se queja, están molestos o tristes.
Un "realista" es un conformista, un miedoso que no se atreve a luchar por lo que busca, alguien que no se come las verdes, no un fracasado propiamente sino el Pitufo siempre con la nube negra encima, que trata de no amargarse porque sabe que vive en el infierno, y si pasa algo bueno, tampoco es tan anormal.
Alguien que se puede dar el lujo de filosofar o inventarse un sistema de creencias ajustadísimo, del que no se salen jamás, para evitar lo inevitable: vivir. Así que panas, asúmanlo, son unos pesimistas, para ustedes sólo existe el Tsunami y no los mineros del Matto Grosso que se ganaron la Lotto Miami, para ustedes sólo hay matanzas de delfines y no grupos de niños ciegos conservacionistas, para ustedes sólo hay malandros y corruptos, y no Fe y Alegría, para ustedes vamos directo al infierno, antes, ahora y en el futuro, y para nosotros, los "tontos soñadores optimistas", vamos frenando la locura con los pies, mientras metemos la curva para desviarnos.
Así que con mucho cariño: jódanse.
Al buscar el realismo, vemos que es: "Forma de presentar las cosas tal como son, sin suavizarlas ni exagerarlas." Eso es como ser distinto a quién siempre ve las cosas emocionalmente, sea para bien o mal, es como ser objetivo, neutral, seco más bien.


Un "realista" no es más que alguien que ha decidido no ilusionarse, supuestamente para no deprimirse al no lograr el éxito o para poder decir: ya sabía que iba a fallar. Según estas personas, si pasa algo bueno lo atribuyen a un natural equilibrio cósmico y por eso tampoco se alegran demasiado: Hombre, ¡algo bueno tiene que haber!. Sin embargo, son gente que siempre se queja, están molestos o tristes.

Alguien que se puede dar el lujo de filosofar o inventarse un sistema de creencias ajustadísimo, del que no se salen jamás, para evitar lo inevitable: vivir. Así que panas, asúmanlo, son unos pesimistas, para ustedes sólo existe el Tsunami y no los mineros del Matto Grosso que se ganaron la Lotto Miami, para ustedes sólo hay matanzas de delfines y no grupos de niños ciegos conservacionistas, para ustedes sólo hay malandros y corruptos, y no Fe y Alegría, para ustedes vamos directo al infierno, antes, ahora y en el futuro, y para nosotros, los "tontos soñadores optimistas", vamos frenando la locura con los pies, mientras metemos la curva para desviarnos.
Así que con mucho cariño: jódanse.