31 marzo 2025

Power metal a capella alemán, punk rock español, metal alternativo electrónico internacional, death/black polaco, folk/black internacional, death alemán, hardcore gringo, lo nuevo de Underoath (metalcore/post-hardcore/industrial) y post-industrial avant folk

1. Break The Silence (2011) de Van Canto: banda de power metal sinfónico / a capella, gracias a un coro de cantantes. Un proyecto musical que creo que no recibe el suficiente reconocimiento. 4,3 de 5. Es un sexteto: un baterista/tecladista, cuatro cantantes masculinos y una cantante femenina principal, que es una extraordinaria soprano. Además, que los arreglos de voz del coro son realmente ocurrentes, así no sean "evil". 

2. ¡Peligro! (2025) de Reincidentes: punk español, activista, con momentos de rock y ska. Siempre cae bien escuchar discos así, que hacen crítica social con distorsión y humor negro, 3,5 de 5. Claro, su cantante/bajista Fernando Madina Pepper, nació en Venezuela. 

3. APOCALIPS (2025) de Silos: metalcore / post-hardcore / metal industrial  / rock electrónico de Los Angeles, California. Según su Bandcamp, están compuesto por el danés Philip Strange Nielsen en el bajo, guitarrista ucraniano Nick Dromin, baterista alemán criado en España, David Rehmann y guitarrista español Ramón Blanco Ariza con Ray Garrison, de Atlanta, como el único estadounidense. 

Tienen a músicos invitados de From Ashes To New, Escape The Fate, Orgy, The Haunt y Crazy Town, más una cool versión de Save Tonight de Eagle Eye Cherry. El tema The Answer es básicamente deep house. 
4. Inherited Tendencies for Self-Destruction (2025) de Embrional: furioso y potente death polaco con trazas de black melódico, aunque con un sonido muy mejorable, tiene un gran baterista y buenos riffs, además de shrieks espeluznante. Es como Belphegor pero menos producido. Tienes excelentes solos de guitarra. 3,3 de 5.

5. Ordo Diabolicum (2025) de Aran Angmar: brutalísimo folk/black metal melódico y sinfónico, de sonido pulido y guitarras afiladas, una batería que suena como un tanque de guerra y majestuosas melodías que son acompañadas por un growl gigantesco, arreglos de voces de soprano y sonidos orientalistas, siempre con una atmósfera misteriosa. Los arreglos de instrumentos folk son del polaco Jaroslaw Niemec (de Saratan), especialmente en el tema Primordial Fire, que le da un tono como entre Nile, Behemoth y Orphaned Land.

Es un power trío conformado por un griego, un holandés y un italiano con varios cantantes griegos invitados con experiencia en Chaostar y Behemoth. 4,7 de 5.

6. Landkrieg (2025) de Scalpture: elegante death metal alemán, de melodías majestuosas y adornadas de arreglos increíbles de bajo/batería, con un sonido casi cavernoso y semi-old school e influencias de hardcore, pero con una mirada contemporánea de melodeath técnico que son acompañados por monstruosos growls y un sonido brumoso, atmosférico, pero muy bien producido que le da una dimensión novedosa y grandilocuente, como de sludge atmosférico y apocalíptico, pero sin los sonidos densos y fangosos. Y me encantó la portada.

7. Coast To Coast (2025, split) de Pain Of Truth y Sunami. La primera es muy buena, beatdown hardcore / metalcore de NY, con coros para festejar y guitarras para acabar en el pogo. El segundo tema combina un buen breakdown con un riff de death/thrash. La segunda banda, de San José, California, es más breve, sucia y salvaje, aunque igualmente bueno. A pesar que este disco no me encantó, según mi Deezer, sus discos 2023 me gustaron todas las canciones. 3,7 de 5 en este caso.

8. The Place After This One (2025) de Underoath: me encanta esta banda de metalcore / industrial / post-hardcore y rock alternativo. Este nuevo disco es una gratísima sorpresa por juntar los sonidos de los 90, la locura frenética del nuevo metal de los 2020 con energía renovadora de la electrónica más dura. Loss, uno de los singles, es un temazo con voces limpias y gritos, mucha electrónica, potencia metalera y hasta fraseos raperos, más un breakdown de metalcore melódico e industrial genial. 

Una banda algo incomprendida, a mí me conquistó este disco, 4,3 de 5. La cadencia y los arreglos percusivos de varias canciones me recordó a Knocked Loose y su reggaeaton en la canción con Poppy. De pasapalo: Troy Sanders de invitado en un tema.

9. Halo on the Inside (2025) de Circuits Des Yeux. Haley Fohr y Jackie Lynn son dos de los nombre de esta cantautora de Indiana, residenciada en Chicago, que tiene un rango de voz de 4 octavas y usa una guitarra 12 cuerdas. Su voz me recuerda a Einar Solberg (Leprous). Lee Ranaldo, de Sonic Youth, está invitado como cantante en uno de los temas. La música está entre la electrónica experimental, compleja y estilizada, combinada con instrumentación acústica y analógica, casi como una especie de indie folk / chamber pop / jazz pop, gracias a una gran variedad de músicos invitados que se encargaron no sólo de bajo, percusión, guitarra eléctrica y batería, sino también de saxofón, cello, clarinete bajo, violín, viola y piano, aunque predominan las capas de sintetizadores y las baterías programadas, en ambientes opresivos, enigmáticos y casi fúnebres sin ser nada góticos.

Según RYM se trata de Post-Industrial, Darkwave y Art Pop principalmente, con Neoclassical Darkwave y Electro-Industrial como géneros accesorios. A veces suena como a una versión folk de Diamanda Galas. Es una riquísima mezcla de influencias de música clásica y ópera, algo de funk, post-rock, noise rock, avant folk y mucho más, que nos va paseando por mucho más que raras canciones experimentales con voces profundas, sino que hay incluso dance en el tema Truth (Electronic Body Music), que me recordó al tema I Miss You de Björk. Termina con dos canciones que parecen resumir sus contrastes, entre música avanzada y culta, bastante progresiva y al mismo tiempo, la experimentación oscura e intimista.

30 marzo 2025

Metalcore/post-hardcore gringo, brutal deathcore gringo, jazz death metal avant-garde, black noise español, lo nuevo de Deafheaven (post-black)

1. Shapeshifter (2025) de Memphis May Fire: un disco como de post-hardcore/metalcore/electrónica, bastante decente. Con algunos momentos de pop metal, aunque también de metal industrial y rock electrónico. Creo que en Sputnikmusic se pasaron con las malas críticas. 3,5 de 5.

2. Deteriorate (2025) de Gamma Sector: creo que me divorcié de Sputnikmusic. Sí, es slam death / brutal death, pero tiene riffs disonantes muy buenos, la producción está pulida y hay texturas de death metal vieja escuela que le dan perspectiva. Además, combinarlo con downtempo deathcore le da un aire distinto, para que los arreglos respiren y disfrutar de las progresiones de acordes. 3,5 de 5. Son de Kentucky.

3. Upgrade (2025, EP) de Sarmat: banda de death metal técnico / jazz-fusión / avant-garde, que parece algo entre Imperial Triumphant (que ya no hace jazz metal) con Kayo Dot y cualquier cosa hecha por Colin Marston, quien mezcla y masteriza.

Ahora con cambio de line-up, el disco tiene a James Jones en batería, Steve Blanco (de Imperial Triumphant, en bajo y kitarra), Zachary Blakeslee-Reid (Nine Circles), Ryan Hale (guitarra), Niko Hasapopoulos en contrabajo, Oskar Stenmark y Jerome Burns en trompeta y las voces guturales de Ilya Belko.

Lo mejor es que se intercalan los géneros. Entonces por largos minutos es jazz, con batería y saxofón haciendo de las suyas, para más tarde pasar a loquísimos riffs de figuras imposibles, bajo intercalado y arreglos de metal extremo intrincadísimo y disonante.

4. Forever Is a Feeling (2025) de Lucy Dacus: indie pop folk. Muy bellas canciones, con hermosos arreglos de cuerda, pero no mi tipo de música. 2,5 de 5.

5. From the Visceral Abyss (2025) de Teitanblood: black/death opresivo, oscuro y ruidoso español. Aunque podría ser disonante, está más cerca del noise. Aunque el sonido de las guitarras y batería intencionadamente brillosas y chirriantes, muy cercanos obviamente al Darkthrone más punketo (su logo sale en uno de las portadas de sus discos), tienen claro su concepto, bien construido y diseñado como un soundtrack horroroso y maligno. 3,7 de 5 aunque puede subir con más escuchadas.

6. Lonely People With Power (2025) de Deafheaven, me suena a reinvención. Después de innovar con un post-black metal "geek" o "hipster", aprenden de los distintos maestros que han recorrido este género y se alejan del dream pop / metal alternativo que tocaron en los discos anteriores, para presentar un disco que es furioso, veloz y gélido, con riffs disonantes y shrieks imposibles, rescatando el estilo que los llevó a la gloria en Sunbather aunque ahora más cerca de Portrayal Of Guilt que de My Bloody Valentine. Sin embargo, hay un trasfondo con una riqueza de arreglos más propios de black sinfónico.

29 marzo 2025

Power cyber melodeath ruso, progresivo/melodeath gringo, progresivo psicodélico italiano, brutal deathcore gringo, regrabaciones de Cobra Spell (heavy/hard rock), black melódico italiano, thrash costarricense y metal alternativo/pop rock

1. Rebuilding the Universe (2025) de Sunwalter: extraordinario álbum de power / melodeath /metal electrónico progresivo, que incorpora múltiples capas de guturales de forma teatral y avant-garde, arreglos experimentales que combinan momentos sinfónicos, pistas electrónicas, de sonidos incidentales y manipulaciones digitales, junto a muchos sintetizadores espaciales. Es black metal cósmico, operístico y bizarro, con mucho diseño de sonido. Son de Moscú, Rusia. 

Es una rarísima combinación, pero muy exitosa, en que riffs veloces de power con un sonido industrial, acompañados tanto de un bajo muy técnico, voces de soprano y un ambiente electrónico, expansivo y orquestal al mismo tiempo, con un concepto alienígena, así que en vez de post-metal, space rock o shoegaze, pero tampoco es ambient, sino más new age. Es como Karfagen pero más metalero o Unexpect pero electrónico. Hay algo de Covenant y Bal-Sagoth. Según ellos son Sci-Fi Metal. Puntos: 4,7 de 5. 

2. Ozai (2025, EP) de Nospūn: progresivo gringo que combina shred guitarrero, influencias del rock progresivo setentoso, melodeath y algo de black sinfónico, con sonidos del metal progresivo no extremo. Su debut, Opus (2023) es de lo mejor de ese año. Son de Charlotte, North Carolina, EEUU. Este EP es una reversión del EP del mismo nombre y cuando la banda era homónima, de 2014. Otra joya más, 4,7 de 5.


3. Acid Lake of Io I: The Alchemist's Dream (2025, EP) de Weird Blends. Progresivo / sludge / psicodelia, banda del multi-instrumentista italiano (Cerdeña) Davide Triolo, que se encarga de voces, guitarras, bajo, teclados y hasta la batería. Son tres temas, el final una suite de 17 minutos, en que hay momentos más post-metal, otros en que hay growls y sludge progresivo, otros más psicodélicos y finalmente, cambios inesperados de tiempos y tonos, para una experiencia cósmica brillante. 4,5 de 5.

4. Death Comes to All (2025) de Gates to Hell: Vibrante y monstruoso disco extremo que bordea las fronteras entre el brutal death y el deathcore, invocando viejos espíritus de la música más perversa llenando los riffs de armónicos, baterías de grind y hardcore, con guturales brutales y angulares, algunas de estas pistas misteriosas y fantasmales del death de los 80, más breakdowns profundos y lentos, bastante deathcore. Son de  Kentucky, EEUU. Sería algo como brutal deathcore, con canciones entre 1:30 y 2:30. Me gustaron, 4,2 de 5. 

5. Anthems of the Venomous Hearts (2025, EP) de Cobra Spell: La banda hispano-holandesa liderada por la holandesa/catalana Sonia Anubis ahora es un trío, y la venezolana Roxana Herrera ya no está en ella. Son temas clásicos de la banda, que originalmente fueron interpretados por el italiano Alex Panza, antes del 666, disco debut de 2023, y ahora regrabados con la voz de la española Kristina Vega, la nueva cantante. Súper cool, 4,2 de 5. 

6. Sanguinaria (2025) de Morcolac: un extraño black metal melódico, un shriek vampírico y guitarras chirriantes, pero los riffs parecen sacados de bandas de heavy, epic doom e incluso hard rock pero con distorsión gélida y algunas disonancias. Quizás puede acercarse a Yoth Iria o Watain, pero el sonido es más frío y originario, a veces como Samael originario, sobre todo por los sintetizadores fúnebres.

Power trío italiano conformado por Marco Dal Pastro (Bestia) en la batería, Nicolò Paracchini en los teclados y Riccardo Maestri (Sadomaster) en vocales, bajo y guitarra. Los sintetizadores a veces hacen que suena como una banda de rock psicodélico. Es realmente rara y muy buena por esas locuras. 4,3 de 5.

7. Templo de fraude (2025) de Necrólisis, banda de thrash/speed de Costa Rica, bien vintage y originaria, con un sonido regular tirando a bueno. Buenos riffs arpegiados de thrash, voces algo pobres y una batería que suena con demasiado reverb y algo encajonada. 3,5 de 5, pero las guitarras están muchísimo más arriba. El tema instrumental / guitarrero Rebelión en el Magreb es realmente bueno, y claro, lo mejor del disco. Sin embargo, a pesar de las voces punk y las letras demodé, aunque clásicas, hay momentos de speed y thrash realmente brillantes, en sus momentos instrumentales.

8. Surrender (2025, EP) de Amira Elfeky:  cantautora de Los Angeles que presenta una nueva colección de canciones entre variantes del pop y los tonos más duros del nu-metal, el rock/metal alternativo e incluso el djent. 3,5 de 5.

9. From the Shallows of the Mantle (2025) de Panthalassan: Después de unos buenos singles y un EP, sale el extraordinario álbum del trabajo del canadiense Jake Wright alrededor del power metal, el metal sinfónico y el rock progresivo, en que se combinan complejos riffs de power metal, interludios de acústicas, sintetizadores entre espaciales y misteriosos, algunas tonalidades góticas y al mismo tiempo, momentos llenos de energía entusiasta y épica, junto a contratiempos y extraños cambios de tiempo y tono, lo que contribuyen con un concepto tan intrigante como revelador, pues las habilidades técnicas van desenvolviendo la casi inextricable naturaleza de las canciones. Algo raro es que a pesar de los elaborados arreglos vocales de temas como Abalone hay un par de canciones con voces muy regulares y hasta pobres, como si fuese un compilado de temas en muy distintas épocas.

Les pongo un 4,6 de 5 porque con un vocalista más capaz, tendrían 4,9. Aunque hay temas mucho mejores, como Worth My Salt.

28 marzo 2025

Metalcore gringo, lo nuevo de Spiritworld (alt-country metal demasiado Slayer), pop electrónico sirio-libanés, indie canadiense y nu-metal hindú, doomgaze gringo, post-hardcore/metal británico, deathcore holandés,

1. wither and bloom (EP, 2025) de Two Sides Of Me: Metalcore de Goode, Virgina, Estados Unidos. Interesante, 3,7 de 5.

2. Hellodorado (2025) de Spiritworld: Después de sorprender al mundo del rock/metal con Deathwestern, la banda de Las Vegas, Nevada, que combinaba thrash, country y metalcore de forma novedosa, extraña y estimulante, ahora este es un disco que copia demasiado a Slayer y se convierte en una banda de stoner/sludge/alt-country bastante dura, con un sonido sucio y thrashero, con gritos grupales como de hardcore pero que claramente ha perdido el rumbo. Sin embargo, el sonido, los arreglos y el ambiente en general me parecen bastante buenos. Es decir, decepcionante para la carrera de la banda pero si lo aíslas, está decentemente bueno, a pesar de lo derivativo. 3,5 de 5. 

3. Ghoyoum (2025) de Kazdoura: según Sputnikmusic, es un dúo de indie soul / pop de Toronto, Canadá, conformado por la cantante Leen Hamo de Siria y el multi-instrumentista Johnny Abou Chacra del Líbano, que crean una fusión árabe modernizada, que puede tener música tradicional árabe con jazz, fun, disco, electro-pop y por lo que escucho, también rock y trip hop. Me pareció ligero, refrescante y distinto. Grandioso para el alma, mi algoritmo y la diversidad. 4,3 de 5.
4. The Open Up (2025) de Frog Eyes: banda indie canadiense que me sonó a post-punk, indie folk y experimental. Bastante buena, que tiene momentos de calma acústica, guitarras noise en pinceladas y un ambiente de experimentación constante, de contemplación y de innovación DIY, por lo que hay momentos aert rock y slacker. Me gusta aprender de la nueva escena alternativa. 4,2 de 5.

5. Nu Delhi (2025) de Bloodywood: después de ser una rareza y sensación de Internet, con la combinación de nu-metal, metalcore y música hindú llega el tercer disco de esta banda Nueva Delhi. Aunque no es tan genial ni brutal, gana mucho al mezcla música electrónica (con Babymetal apoyando en un tema de J-pop/electronicore), además de música tradicional Bhangra y Punjabi (según RYM). Hay más sonoridades y capas pero recuerda demasiado a las mezclas que ya hicieron antes Sepultura y Puya, por ejemplo. El mejor tema, Daggebaaz. 3,9 de 5. 

6.  Let The Light In (2025) de SOM: banda de metal alternativo que parece combinar el dream pop/nu-metal/shoegaze de Deftones con voces oníricas y ambientales del pop noise/rock alternativo/post-metal, con muy complejos arreglos de progresivo industrial y groove metal. Swgún RYM es doomgaze, por lo que me suena a Katatonia con Intronaut. Es realmente una delicia de polifonías y capas de guitarras sobre efectos electrónicos, que también recuerda a Cult Of Luna y Alcest pero siempre con voz limpia e hipnótica, un poco a lo Perry Farrel en space rock y la mayoría de las veces a lo Savage Garden, aunque siempre desde la mirada del metal alternativo. Es muy buena, aunque esto de sonar a tantas bandas, no siempre es lo mejor. 4,2 de 5. 

7. Pig (EP, 2025) de teng56. Metalcore salvaje. Muy bueno / Narrow, narrow de Svnth: con base en el blackgaze / black atmosférico siento que entran en algo más amplio y mixto, entre el hardcore y el rock alternativo lleno de oscuridad. 

8. If Your Roots Run Deep, You Can't Fear The Wind (2025, EP) de Pleiades: post-hardcore, post-metal y post-rock británico maravilloso. Por momentos hay math rock. Buena combinación, quiero mucho más, 4,7 de 5. 

9. Transcend (2025) de Torn From Oblivion. Deathcore holandés, aunque hay screamo, hardcore y hasta nu-metal/rapcore en la mezcla. Muy buenos, de verdad, 4,3 de 5.

26 marzo 2025

El "perreo cósmico" de Héctor Guerra, power metal australiano, metal operístico alemán, slacker rock / noise pop muy nostálgico de Canadá, brutal death gringo, black/folk alemán, alt-pop/RnB, hiphop sureño/boom bap (Doechii)

0. Hoy debo terminar lo de Probox, preparar la clase de mañana y publicar algo en Cocuyo Chequea.

1. On My Command: un trío de singles de power/thrash de Australia, realmente poderosos e innovadores. Es el proyecto del músico Sean Mackay junto al baterista de The Anchoret y Aviations.

2. Cumbiando el mundo (2025) de Héctor Guerra: cumbia psicodélica humorística con sátira sobre términos sociales actuales, teorías de conspiración alienígenas y cultura de cancelación, sobre una fusión de folclore latinoamericano con electrónica latina, pero la segunda parte del disco se abre a más ritmos, desde el hip hop y el rap a ska, reggae, bachata y muchos más. Héctor es un rapero español-boliviano, inventor del género que ha bautizado como Perreo Cósmico. Divertido, 4 de 5.

3. Schuld (2012)de Molllust: debut de esta banda de metal sinfónico alemán conformado por Janika Groß (vocales, piano) y Frank Schumacher (vocales, guitarra), que han tocado/tocan con Haggard más una variedad de músicos académicos/metaleros que han variado. Es altamente operístico y orquestal, con una presentación en vivo con decenas de músicos como Therion o sus colegas alemanes. Discazo, 4,7 de 5.

4. a seasons end. (2025) de bug drug. Este es un divertido disco, nostálgico, que toma dulces melodías vintage de rock and roll, incluyendo doo woop y motown, para presentarlas en una especie de mezcla de pop barroco, noise pop y garage rock bastante lo-fi, como si The Strokes fuesen aún más crudos y agregaran instrumentos de viento.

Según Rate Your Music son parte del movimiento de Emo Revival, mientras el disco es de slacker rock y noise pop, apelando también al indie surf, chamber pop, twee pop e indie folk. Sin embargo, puedo ver en la discusión que no hay acuerdo entre si esta es una banda que hace géneros originarios como Motown y Sunshine Pop, si es un revival o si está en el medio de ambos, que es lo que creo. No los veo indie folk, ni siquiera en los momentos en que puedan recordar a Beirut, por ejemplo y el surf es apenas superficial, es aún más retro.

Pues aunque la lista de géneros parece bastante descriptiva, no llega a decir lo originario y proto-rock que suena, como si viéramos a una banda de los 50 tocando con la calidad de sonido de la época, sin pulir demasiado el choque de brillos y estridencias del hit hat ni de la distorsión de las guitarras, pero con la actitud desenfada actual del indie, cultura DIY y por supuesto, algo de ironía.

Se puede notar en cómo suenan los instrumentos folk, casi como si fuese un vinil con sus ruidos e imperfecciones, pero de forma real, sin la estética recreada digitalmente. Es decir, trataron de sonar tanto como se puede viajar en el tiempo, seguramente usando técnicas de grabación, producción e instrumentación de la época. Pero lo estoy escuchando digitalmente.

Y aunque eso es, o puede ser, slacker, suenan mucho más vintage que cualquier banda de los últimos 20 años. Interesantes, 4,3 de 5. Son de Edmond, Canadá.

5. 3 (2025) de Bodybox: brutal death / hardcore poderosísimo y muy bueno. Con algo de fraseos raperos/hardcore al final que le suman a la propuesta, que usualmente es demasiado básica, repetitiva u obvia, en este caso, me pareció con muchísimo gancho y brillo. 4,4 de 5. 

6. Wanderungen durch den Daemmerwald (2013) de Aethernaeum: black/folk atmosférico alemán, ahora disueltos, obra alrededor del músico Alexander Paul Blake, quien hace voces, bajo, guitarra y teclados. Otra joya misteriosa escondida entre mis favoritos de Deezer. Es el tipo de banda entre cruda y melódica, experimental y osada, que más me atrae. Son underground, valiosos y raros.

Me recuerdan a Summoning aunque con un sonido mucho más expansivo y melódico, así como también más completo y colectivo, que incluye un shriek aserrado, orquestaciones poderosas gracias a la presencia de un cellista en la banda y un blast beat aplastante. Los arreglos sincopados de sintetizadores, lentos riffs arpegiados y momentos calmados, bastante góticos, añaden profundidad al disco, de temas extensos. 

Fue un proyecto aparte de varios de los músicos de la banda de metal gótico Eden weint im Grab, que incluyen a Blake. Puntuación: 4,3 de 5.

7. SteSy: singles de esta banda de metalcore / eurodance austriaca, cuyo cantante estuvo en varias rondas de The Voice Alemania. Es divertido y loco, porque siempre hay guturales, incluso en las versiones de Eiffel 85 o Vengaboys. Es medio infantil pero se goza. Unos singles de Suck Puppies, rockeros/metaleros alternativos de Australia. Regulares, con buenos y horribles momentos. Su bajista toca en Evanescence. 

8. Off With Her Head (2025) de Banks: downtempo / r&b / pop según Sputnikmusic. Cantante de Los Angeles con cinco discos encima desde 2014 con Goddess. Me lo recomienda Deezer. Tiene a Doechii y a Yseult de invitadas, lo que ya es alta ganancia. Según RYM es Pop y R&B alternativo, con algo de dance-pop y post-dubstep. No es mi tipo de música pero aprecio que la producción y voz me gustan bastante. Mucho más que Sasami e incluso que Magdalena Bay y Charlie XCX. 3,5 de 5. 

9. Alligator Bits Never Heals (2024) de Doechii: el maravilloso álbum del año pasado que impulsó a esta cantante a ser estrella de la interpretación en redes sociales y distintos shows en vivo, con sus rarezas vocales, letras sobre ser mujer, el sexo y la relación con las redes sociales. Se me había escapado pero lo aprecié a tiempo. A veces me recuerda al RnB alternativo y vaporoso de Kali Uchis. 

Maravilla de Hip Hop sureño, que se alimenta de encantador boom bap, hardcore hip hop, trap y distintas formas underground del rap. Esperemos no sea convierta en algo demasiado mainstream en forma, es decir, que siga siendo atrevida, rara y retadora. 4,8 de 5.

10. GOLD (2025) de Scour: repito esta bestialidad de black/death hiper furioso, veloz y perverso, lo mejor que ha hecho en el género el pana Phil Anselmo. 

25 marzo 2025

Power/melodeath alemán de comedia, rock/reggae/dub fusión francés, thrashcore de NY, bagatelas de John Zorn en noise rock, reinterpretaciones de Ravel, death/doom melódico alemán, hard rock / glam sueco, progresivo sueco y canadiense (rock primero jazz/metal luego), metal alternativo finés, metal alternativo/post-hardcore australiano

0. A trabajar duro con lo de Probox.

1. Dead Or Alive (2006, EP) de Grailknights. Power metal / comedia alemán, con grandes coros, gracias a que parte de sus músicos y sus invitados han participado o son parte de Van Canto. Me gustan bastante. La música es impecable, los arreglos realmente buenos y este EP apenas es una muestra de todo lo que hacen con buen humor y sin ser una banda tan humorística. 4,3 de 5. Además, aún tienen guturales y momentos de melodeath. Además, el tema final, el Superhero Medley mezcla clásicos del metal, desde Slayer y Judas Priest, con temas de Las Tortugas Ninja, El Hombre Araña y mucho más. Son genaiales.

2. C'est pas à vous qu'ça m'arriverait (2025) de Marcel & Son Orchestre: gracias, Deezer, por recomendarme artistas franceses que jamás en la vida habría escuchado. Básicamente es música alternativa fusión con rock, reggae, dub, ska y lo que según RYM es Chanson francesa alternativa. Es divertido y que jamás habría encontrado por mí mismo. Ahora sí alimenté mi algoritmo. 

3. Belly of the Beast (2025) de Combust: crossover thrash, hardcore punk y hardcore de NY, de La Gran Manzana. Me parece potente, entretenido y muy bien producido, con un sonido transparente que permite ver la variedad de cambios, riffs y arreglos vocales, porque tienen media docena de invitados. Puede haber algo de metalcore pero lo que domina es la actitud y ethos del punk, aunque el sonido es realmente thrashoso pero también pulido. Es demoledor y al mismo tiempo, declarativo. 4,3 de 5. Es menos "rapero" que sus congéneres. 

4. Bagatelles Vol. 3 (2025) de John Zorn interpretados por Trigger. Después de las versiones de jazz/rock progresivo de Mary Halvorson, y las versiones de chamber pop con dos cellos, ahora viene otra forma distinta. Trigger prueba con algo que se parece a algo que haría Colin Marston, algo entre el death metal progresivo de vanguardia y el noise experimental, con mucho bajo industrial. 4,5 de 5.

Trigger es un power trío de noise rock de NY, conformado por Will Greene (guitarra eléctrica), Simon Sheldon Hanes (bajo eléctrico) y Aaron Edgcomb (batería). 

5. Ravel: String Quartet (2025) de Attaca Quartet. Cuatro maravillosas composiciones del compositor francés impresionista en cello y violín del grupo de chamber music de NY. 5 de 5, glorioso. 

6. At the End of Infinity (2013, EP) de Dissecdead: de verdad tengo música rara en mi colección de Deezer, pero en el mejor de los sentidos. Este death melódico alemán, súper brutal y ruidoso es uno del que no tengo ningún recuerdo. Es realmente bueno, increíble, pues toma lo melódico y accesible de los riffs del death sueco para meterlo en lava, ácido y munición, con un sonido y voces similares a las de Morbid Angel y Obituary, añadirles armonías que parecen venir del jazz latino o del groove metal, con el sonido asesino de Deicide. Enciclopédico y corrosivo. Quiero más. 4,6 de 5.

7. Thrill of the Bite (2025) de Crazy Lixx: hard rock / heavy / glam de Suecia. Entretenidos, bien producidos, deben ser la delicia de los nostálgicos. Me gustan pero no volvería a escucharlos, aunque les concedo la calidad, son efímeros para mí. 3 de 5.

8. Transmutation (2025) de Karmakanic: rock progresivo sinfónico sueco, muy melódico, bastante accesible, con largas partes de orquestaciones y/o pianos, así como guitarra acústica. Es un disco generalmente con canciones largas, entre 6 y 7 minutos, más el cierre con una suite de 22 minutos que recorrer distintos rincones de la galaxia del rock progresivo, desde el shred guitarrero hasta las expansivas formas de experimentación sinfónica, con muy buena producción vocal. 

Se destaca especialmente los circulares arreglos de bajo, que aderezan arreglos que van entre el space rock y el progresivo psicodélico a momentos mucho más meditativos y calmados. Es el trabajo cuasi solitario del bajista y multi-instrumentista Jonas Reingold, quien se encargó también del bajo, teclados, guitarra eléctrica, voces y coros, junto a Krister Jonsson en guitarra líder (de la mayoría pero no todas las canciones), Göran Edman en la voz de un tema y Lalle Larsson en el teclado de un par de canciones.

Además, muchos invitados como el legendario Andy Tillison (ahora en The Anchoret) en Hammond y clavinete, Simon Phillips en batería y percusión, Jan-Olof Jonsson en guitarras acústicas, Luke Machin en solos y guitarra acústica, John Mitchell (Frost*) cantando en casi todas las canciones más guitarra 12 cuerdas, Randy McStine en voces, guitarras, coros y también guitarra 12 cuerdas acústica. Geri Schuller en piano, Craig Blundell  en batería, Dina Höblinger en voces, Lelo Nika en acordión, Markus Lukastik en flauta, Rob Townsend en saxofones, Tomas Bodin en teclados, Sven Cirnski en guitarra eléctrica, Nick D'Virgilio en batería, el legendario Steve Hackett en guitarra acústica de nylon, Amanda Lehmann en coros y Roger King en teclados. Casi todos para el último tema extenso.

8. It All Began with Loneliness (2023) de The Anchoret: una joya del rock/metal progresivo, uniendo jazz, arreglos orquestales, guitarras psicodélicas, una voz prodigiosa y atentos arreglos de tiempos imposibles con la dulce accesibilidad de las canciones bien cantadas, con coros y puentes. Increíbles, 5 de 5. Acá los reseñé en solitario.

9. Leech y otros singles de Luna Kills, banda de metal alternativo de Finlandia conformada por Lotta Ruutiainen (vocales), Lassi Peltonen (bajo), Samuli Paasineva (guitarra) y Jimi Kinnunen (batería). Shrieks profundos, voz melódica, muchos arreglos electrónicos y guitarras metalcoreras, con un bajo profundo e industrial. RYM habla también de electronicore y nu-metal, y puedo ver la coincidencia entre rock electrónico, post-hardcore y algo de djent.

10. Mutation (2024) de RedHook: metal alternativo / post-hardcore / emo-pop de Australia, con voz femenina. Excitantes arreglos de nu-metal/djent, buenas voces combinadas y guitarras gigantes con arreglos creativos de saxofón y electrónica. Muy divertidos, 4,3 de 5. Con Emmy Mack (vocales), Craig Wilkinson (guitarra, programación), Alex Powys (batería) y Maverick Burnett (bajo).

24 marzo 2025

Lo nuevo de Jethro Tull (progresivo / rock clásico), nu-jazz/dub/trip hop orgánico y vivo (Red Snapper), rock alternativo/metalcore británico, hardcore gringo, melodeath melódico alemán, soundtrack surcoreano de videojuegos, hard rock / power pop / glam punk británico

0. Festivo, no hubo clases en la universidad. Quiero practicar katas en la tarde/noche para darme más seguridad.

1. Curious Ruminant (2025) de Jethro Tull: es como raro decir esto, pero este disco de estas leyendas del rock progresivo / folk no suenan a sí mismos, lo que no debería ser malo per sé, pero escuché menos flauta, menos rarezas y más baladas sin demasiados cambios de onda. Bastante regular, 3,5 de 5. En este caso, la banda está conformada por Ian Anderson en flauta, voces, guitarra tenor y acústica, mandolina, letras y composición. David Goodier en el bajo. John O'Hara en piano, teclados y acordeón. Jack Clark en guitarra eléctrica y Scott Hammond en batería, reforzados por James Duncan en batería, cajón y percusión. Andrew Giddings en piano, teclados y acordeón.

2. Prince Blimey (1996) de Red Snapper: esta banda me parece increíble, porque suena electrónica pero es bajo, guitarra, batería e instrumentos de viento para hacer acid jazz, dub y nu jazz, así como mi electrónica favorita, el breakbeat, cubriendo desde el trip hop al drum n bass. La versión extendida tiene además remezclas y versiones electrónicas que me hacen bailar y sonreír. 4,8 de 5.

3. On a Knife's Edge (2025, EP) de State Of You, excelente rock alternativo, post-hardcore y metalcore de Reino Unido. Aunque no demasiado distintivo, está bueno. 3,6 de 5.

4. Idaho (2025) de Ingrown: hardcore de Boise, EEUU, rozando el grindcore y a veces hasta el metal. Lleno de batería furiosa, grunts con gritos corales punketos y feedbacks como iniciadores de canciones, siempre de menos de 2 minutos. 3,6 de 5. Eso de Metalcore según RYM me parece un pelón total. 

5. Four Songs for the Left Behind (EP, 2012) de Another Perfect Day: un seductor, oscuro y muy bello melodeath progresivo alemán, en que se conjugan influencias del doom, el metal gótico (con gritos femeninos horroríficos) y algo del black atmosférico. Un gutural cavernoso, una voz limpia muy evocadora y guitarras que se pasean entre las dobles armonías y el martillo de concreto del death/doom, los arreglos orquestales y las ambientaciones fantasmagóricas resultan en una alquimia de emociones y texturas increíblemente atrapantes, que puede recordar a Agathodaimon.

Es el trabajo solista de Kristian "Kohle" Kohlmannslehner, más conocido por su trabajo como productor e ingeniero de sonido en su estudio Kohlekeller Studio, en Seeheim, Alemania. Lamentablemente desde entonces no ha publicado nada más bajo este nombre. Entonces invitó a participar con sus vocales a Asphodel (öOoOoOoOoOo), Dan Swano, Sam Anetzberger, Frank Nordmann y Julien Truchan (Benighted) junto al baterista Roel van Helden (Powerwolf) y las orquestaciones de Dominic G. Joutsen. 4,7 de 5.

6. Will you still love me? (2025) de TheCityIsOurs, me recuerdan a Twelve Foot Ninja con Bilmury y Papa Roach. Son de Londres y según RYM es Alternative Metal, Metalcore y Pop Rock, entonces sí pero le falta más porque hay humor negro, sátira e innovación en la mezcla de sonidos de RnB/metal, combinación de post-hardcore con extrañas y diversas formas de texturas, que van desde usar sonidos como del pop de Backstreet Boys a guitarras afiladas de metal californiano y guturales monstruosos. 4,3 de 5.

7. Stellar Blade Original Soundtrack (2024) de Shift Up- Totalmente inesperado pero encantador disco de soundtrack de videojuegos de Corea del Sur. No lo escuché completo por el disco pasa las 10 horas pero me enganché con los temas de la compositora Youngjee Lee. Los temas que escuché van desde el smooth jazz vocal a la ópera, de las power ballads a lo orquestal. Maravillosa experiencia.4,5 de 5.

8. Satanic Rites of The Wildhearts (2025) de The Wildhearts. Este nombre quizás es tan o más confuso que el The Eagles Of Death Metal. En este caso hablamos de lo que podría decir es algo entre el black n roll, el hard rock revival / gótico tipo Ghost e incluso el rock alternativo / pop punk / arena rock, pero también un rock duro con influencias vintage como The Hellacopters, e incluso algunos riffs arpegiados de rock progresivo y canciones con grandes guitarras y baterías industriales.

Sputnikmusic se limita a tres etiquetas, que apenas son rock, pop y hard rock aunque se queda cortísimo porque hay algo de metal y sí, mucho de pop rock. Según RYM, tampoco hay amplísima claridad, hard rock, punk rock y power pop. Que sí, pero los arreglos con teclados y sintetizadores, e incluso riffs tipo Dire Straits, los momentos grandiosos de glam rock e incluso yatch rock, pero también los shrieks y las guitarras más punketas, hacen que cualquier descripción se queda corta. 

Son de Newclastle, Reino Unido, y veo que tuvieron momentos de mayor gloria (de la crítica) entre 1993 y 1997, luego discos más esporádicos y acercamientos al noise primero y al power pop luego, después de haber cultivado el glam punk que ahora parece diluido con más hard rock y sonidos contemporáneos, e incluso casi nu-metal en forma. Es realmente divertido y creativo, genialmente diferente. 4,3 de 5.

23 marzo 2025

Death/doom gótico finés, death sinfónico súper operístico, jazz-rock avant-garde, black polaco misterioso (con videos de IA), indie pop/rock elegante y ruidoso, death/black turco

0. Debo vencer el temor a equivocarme en público en el Dojo, a pesar de la preparación. Creo que es ese temor a que en el kata no puedo improvisar y adaptarme, sino cumplir a cabalidad.

1. The Unending (2025, EP) de Hanging Garden. Elegante y potente death/doom gótico de Finlandia, una escuela que sabe combinar melodía y brutalidad, así que lo gótico fue sónico pero no ralentizaba ni abrumaba. Me gustó que no fue demasiado fúnebre, con una cantante invitada y bastante brutal. 4,3 de 5. Fácil. 
2. Apostle to the Malevolent (2025) de Kerberos, según Metallum es death metal sinfónico progresivo, aunque prefiero llamarlos death/power neoclásico y operístico, porque junto a los veloces y muy progresivos riffs de power metal y un bajo de thrash técnico que hace piruetas se escuchan arreglos de clavicordios y órganos de iglesia que se entrecruzan en tiempos extraños con coros medievales de nueve personas con voces de barítono, tenor, soprano y contraltos y arreglos sinfónicos con dos violines, viola y cellos.

En otros momentos las guitarras son más death/black con arpegios en incesantes contratiempos giratorios y reversos y shrieks perversos y penetrantes, que se complementan entonces con las voces y orquestaciones de formas más cercanas al death sinfónico aunque hay más guturales y arreglos progresivos laberínticos entonces.

Es un cuarteto suizo compuesto por Félicien Burkard en voces, guitarras, bajo sin traste, voces de barítono y tenor y composición; el baterista Nicolas Käser; Ai-lan Metzger en voces, coros de soprano y contralto y composición y el guitarrista Diego Lanzendörfer. 4,7 de 5, maravilloso.

3. Consentrik Quartet (2025) de Nels Cline's Consentrik Quartet: hipnótico y hedonista disco de jazz. Según RYM hay distintos géneros del jazz acá: avant-garde, mezclado con rock, cool y post-bop. El guitarrista Nels Cline (estadounidense, de LA) se acompaña de la alemana Ingrid Laubrock el saxofón tenor, Chris Lightcap en el contrabando y Tom Rainey en la batería. A estos discos les pongo 5 de 5 sin chistar porque son de otra galaxia. 

Cline es invitado en el disco 2025 de clipping. y él es guitarrista de la banda de rock experimental Wilco. Por eso quizás escuchamos en temas como Satomi y Inner Wall algo más cercano al post-rock, la música experimental y la fusión jazz, que me hizo pensar en Imperial Triumphant, mientras que en algunos temas hay ritmos y formas de jazz muy tradicional, mientras en la mayoría hay formas innovadoras y raras aunque dentro del propio género, con muchos solos de saxofón y la guitarra haciendo gala de versatilidad, lo que es reforzado por la parte rítmica, en la que escuchamos los característicos sonidos del bajo acústico y las escobillas sobre platillos y tambores. Un universo amplio de sonoridades en diversas épocas.

4. Czart, la misteriosa banda de black industrial y sinfónico que está impresionando a todos con sus impresionantes videos generados por Inteligencia Artificial. La propia banda se ha descrito en redes sociales como "artistas multimedia" de Polonia. La música sí parece orgánica, con un cantante hábil que tiene un shriek puzante y un growl más usualmente usado en el brutal death y claramente influenciado por el post-metal, mientras que la música se basa en cambiantes ritmos llenos de riffs mid-tempo, enriquecidos con voces femeninas, arreglos de clarinete y samples. Se escucha como Dark Age, Behemoth y Aquilus pasado por And Oceans y Anaal Nathrakh.

5. Drive To Goldenhammer (2025) de Divorce: elegante y ruidoso, romántico, vintage y vaporoso indie rock / indie pop de Nottingham, Reino Unido, que me hace pensar en una versión slacker rock del easy listening de los 50, aunque hay temas más noise pop y cercanos al alt-folk, el rock alternativo o simplemente, el indie rock, también hay unos románticos de alt-country, pop barroco y alt-folk, por medio de una amplísima cantidad de pequeños sonidos, de arreglos mínimos, de momentos de suave y hermosos pianos, sintetizadores, órganos, que pasan a feedback de guitarra que son completados con espasmódicos arreglos percusivos. Entonces se pasean del pop al rock.

La banda es Felix Mackenzie-Barrow (guitarra eléctrica, voz, piano, guitarras 12 cuerdas (acústica y eléctrica), Rhodes, órgano, guitarra barítona y armonio), Tiger Cohen-Towell (voz, bajo, sintetizador, órgano eléctrico, piano y órgano). Adam Peter Smith (órgano, guitarra eléctrica y acústica, coros, sintetizador, guitarra barítona y semi-acústica) y Kasper Sandstrøm en la batería, guitarra acústica, eléctrica y 12 cuerdas, sintetizador, piano, percusión, coros, órgano y programación). Me gustó bastante, 4,3 de 5.

6. Punishment (2025, EP) de Crown Magnetar: deathcore furiosísimo, monstruoso, aunque un poco genérico, tiene buenos momentos de burtal/slam. Son de Colorado Springs. Me gustó, pero 3,5 de 5. 

7. I, Moloch (2025) de Shrine Of Denial: debut de esta banda turca death/black con momentos técnicos, de brutal death y otros de black atmosférico. Esto es música extrema como deber ser, brutal, feroz, rápida y dinámica, además de misteriosa, atmosférica y directa, sin concesiones. Me gustó, 4,2 de 5.


22 marzo 2025

EP de Manu Chao y lo nuevo de Imperial Triumphant (black/death disonante, avant-garde y progresivo de NY) y Cradle Of Filth (black sinfónico, melódico y vampírico), post-punk/noise/dance-punk, thrash extremo californiano, hip hop australiano, black n roll californiano, black atmosférico ucraniano

0. Sábado de doble entrenamiento de kárate.

1. Coracao No Mar (EP, 2025) de Manu Chao. Después de Clandestino, este artista hispano-francés sólo gira alrededor de su mejor momento como solista. Diría que 3,3 de 5. Homens es una letra nueva del tema King Of The Bongo sobre los hombres en portugués. 

2. Goldstar (2025) de Imperial Triumphant. Los maestros niuyorkinos del death/jazz/black disonante, avantgarde y progresivo llegan a su sexto álbum en plena forma. Canciones que evocan la época dorada del jazz en su ciudad, homenajeadas por medio de caóticas formas rítmicas que beben del trago majestuoso de combinar este arte estadounidense y metal extremo progresivo, se le añaden aún más extrañas tiempos y figuras melódicas que con polifonías y polirritmos hacen una enrevesada travesía por sonidos terroríficos, elegantes y perversos, como nos tiene acostumbrados. 

Pero ahora no hay saxofón ni jazz fusión, sino es un disco más dedicado al metal avant-garde y las posibilidades sónicas de la oscuridad configurada en una banda de metal extremo disonante, mientras por otro lado hay una paciencia en tiempos y progresión para ir desarrollando esas ideas que podrían haberse presentado demasiado sucias, apresuradas o estridentes, para después de reflexiones y reversiones, mostrar cómo se aprende también de la máxima capacidad ya demostrada para reconvertirse en la idea original de usar ideas de un género pero tocadas de otra forma. Además, hay algo de psicodelia, sludge y hasta industrial, así que es más Ulcerate que Atheist.

El dorado power trío enmascarado de Zachary Ezrin (voces, guitarras y orquestaciones), Kenny Grohowski (batería) y Steve Blanco (bajo, teclado, piano y voces) ya no sólo ofrece pasadizos y retornos infinitesimales, sino un diseño de sonido conceptual que se retroalimenta constantemente, por lo que parece que damos giros concéntricos por la ciudad y sus motivos musicales. Sin desmeritar el trabajo propio, el mejor tema indudablemente es Pleasuredome con los bateristas Dave Lombardo y Tomas Haake de invitados. 

3. The Screaming of the Valkyries (2025) de Cradle of Filth, si el Hammer Of The Witches era el regreso hacia el black metal, menos gótico y punketo, extremo pero melódico, este disco nos devuelve a la banda a los noventa en que amalgamaban la música medieval y barroca al metal, convirtiéndolo en un soundtrack de horror, sensualidad vampírica y elegancia gótica. 

Ahora este disco suena a un regreso de elementos como los riffs de NWOBHM, las voces femeninas combinadas con las narraciones góticas de Dani Filth, en una atmósfera musical que combina metal gótico y black melódico con violines y sintetizadores, pero la banda no se está imitando ni regresando a los orígenes, es un poco de esto y una nueva senda admitiendo quienes son realmente.

CoF seguirá siendo mayoritariamente gótico, pero también serán vampíricos con corpse paint. Así que volveremos a escuchar esos riffs de heavy/speed de los primeros discos, baterías en gallop e influencias del punk/post-punk, así como algunos clavicordios, también las guitarras distorsionadas y veloces a lo Vempire, Principle Of Evil Made Flesh y Dusk And Her Embrace, con ese raro ritmo de rock and roll con distorsión noruega y también usar grunts, shrieks a toda velocidad, chillidos y alteraciones barítonas que acompañan a lentos riffs apoyados de orquestaciones y ritmos a mid-tempo, más goth que rock, pero ahora los arreglos vocales de las sopranos son más más melódicos operísticos y las guitarras tendrán momentos sin distorsión.

Y este cambio vocal se debe a que a la llegada de Zoe Marie Federoff (Vivaldi Metal Project, Catalyst Crime - metal sinfónico, Atrocity), la quinta tecladista/cantante de la banda pero con experiencia en bandas de power y black sinfónico. El otro cambio relevante es la entrada del guitarrista Donny Burbage (Aether Realm). 

Mi tema favorito, el final, Malignant Perfection. Puntuación, 4,3 de 5.

4. Soft Spot (2025) de Honningbarna: disco estridente, raro y experimental, que se pasea por el noise rock y el post-hardcore pero dentro de tanta explosividad y brillo de las guitarras, hay mucho espacio para derivaciones agresivas de la electrónica como synth-punk y dance-punk. El resultado es una especie de post-punk muy estridente o un hardcore punk demasiado bailable. A veces me recuerdan a una versión muy industrial de Porno For Pyros. 

Aunque estos noruegos por momentos, que suenan muy ingleses, también usan polifonías y capas de muchas guitarras, que incluyen algunas en trémolo picking y teclados como si fuese black sinfónico, e incluso blast beats para combinarlo con indie rock, hardcore punk y mucha electrónica de los 90, desde deep house a techno.
Bueno, 4,2 de 5. 

5. Wrath and Ruin (2025) de Warbringer: extraordinario disco de thrash extremo de esta banda de Ventura, California, que sólo usa guturales entre un extraordinario shriek y la voz rasgada de Kreator, e incluso esos falsettos metaleros que pueden ser vampíricos, con arreglos de melodeath y black melódico, así como una batería que suena al death de Florida de los 90 en el uso de los platillos. Me gusta muchísimo esta banda que une generaciones y es tan brutal con una producción tan transparente.

Como en el disco anterior, Carlos Cruz, ya no sólo se encarga de la batería sino agrega varias guitarras rítmicas, acústicas y limpias, teclados y compuso ocho de los temas. La banda también tiene al bajista Chase Bryant (ex Pomenagrate Tiger y de ONI), el guitarrista Chase Becker (Exmortus) y el fundador Adam Carroll, una combinación de experiencias que hacen que esta banda combina influencias europeas, estadounidenses y de world music. Maravilloso, 4,8 de 5.

6. Broken Syllables (2025) de C.Rae: después de no sé cuántos singles y colaboraciones, segundo disco de este rapero australiano. Suena como al hip hop/RnB más dramático, con alguillo de horrorcore a veces y en otras parece algo parecido a Eminem/Dr.Dre. Termina siendo algo aburrido por repetitivo, 3,3 de 5. 

7. Гра тіней (Shadow Play) de Drudkh: decimotercer disco del grupo ucraniano black atmosférico compuesto por Roman Sayenko (Роман Саєнко) en guitarra y bajo, Роман Благих (Roman Blagih) en voz y teclados, Taras en el bajo y Владислав Петров (Vladislav Petrov) en la batería, aunque no está demasiado claro si ese es la alineación oficial.

El primer tema, tan largo como los demás, entre 7 a 12 minutos, es puramente folk y luego escuchamos un black rápido, enfocado en contrastar en claroscuro un blast beat y guitarra de fondo muy old-school con teclados al frente con una propuesta más melódico e incluso sinfónica, como si convivieran las dos formas del género al mismo tiempo en una reconciliación de sombras diversas. 

8. Cult of the Serpent Sun (2025) de Nite: me gustan mucho las bandas que toman sonidos del rock para transformarlas en metal, haciendo una alquimia de distorsión y efectos sobre riffs que cabrían perfectamente en bandas mucho más antiguas como mis grandes favoritos, Tribulation y Kvelertak, y claro, Ghost.

En este caso, los riffs de rock and roll y heavy metal, tipo Maiden y Judas, son presentados en un altar de sludge, black y doom. Así esta banda de California sustituye las voces magistrales y operáticas por un shriek misterioso, conservando los tropos del heavy a mid-tempo, sin gallop ni sintetizadores, sino directamente usando los mismos riffs y las dobles armonías pero con distorsión más metalera, muchos reverb y una oscuridad más dura que la de Ghost sin llegar al black gótico de Tribulation. 

21 marzo 2025

La evolución de los súper héroes como representaciones de grupos sociales, según ChatGTP For Writer

 Le pregunté a ChatGTP for Writer sobre la evolución de los súper héroes como representación de las personas que tenían un estatus similar en la sociedad, partiendo de que éramos los periodistas y luego los científicos pero más tarde fue los marginados, migrantes, diferentes, como los X-Men.

Me respondió esto, que luego edité.

📌 La evolución de los héroes y su representación en la cultura popular


📜 1. Periodistas y reporteros: La búsqueda de la verdad (Décadas de 1930-1960)

Los primeros superhéroes icónicos reflejaban la importancia de los medios de comunicación en la sociedad. En una época donde la prensa tenía un papel crucial en la defensa de la justicia y la democracia, personajes como Clark Kent (Superman) y Peter Parker (Spider-Man) representaban la lucha por la verdad.

Valores clave: Justicia, integridad, responsabilidad social.
Contexto: Época de guerras mundiales y auge del periodismo como herramienta de control social.
Ejemplos: Superman (reportero en The Daily Planet), Spider-Man (fotoperiodista en The Daily Bugle).

📌 Impacto: La prensa era vista como el "cuarto poder", por lo que estos héroes eran reflejo de la confianza en el periodismo como un pilar de la democracia.


🧪 2. Científicos y genios: El poder del conocimiento (Décadas de 1960-1990)

A medida que el mundo entraba en la era espacial y la Guerra Fría, los héroes comenzaron a reflejar el respeto por la ciencia y la innovación tecnológica. Los protagonistas dejaron de ser simples justicieros y pasaron a ser intelectuales, investigadores y expertos en sus campos.

Valores clave: Inteligencia, descubrimiento, ética en la ciencia.
Contexto: Carrera espacial, Guerra Fría, auge de la investigación científica.
Ejemplos:

  • Bruce Banner (Hulk): Un físico nuclear atrapado en su propia creación.
  • Reed Richards (Mister Fantastic): Un líder intelectual que usa su ingenio más que su fuerza.
  • Ant-Man (Hank Pym / Scott Lang): Un héroe basado en la nanotecnología y la física cuántica.

📌 Impacto: La ciencia era vista como la clave del progreso, pero también como una fuerza peligrosa si no se controlaba.


🧑‍🎤 3. Héroes diversos y marginados: La representación de la diferencia (Década de 2000 en adelante)

En el siglo XXI, los héroes empezaron a representar minorías, discriminación y diversidad. La sociedad comenzó a valorar la inclusión y a cuestionar las estructuras tradicionales de poder. Esto llevó a la popularidad de personajes como los X-Men, quienes no solo tenían superpoderes, sino que también simbolizaban la lucha contra el racismo, la homofobia y la discriminación en todas sus formas.

Valores clave: Inclusión, resistencia, identidad.
Contexto: Luchas sociales por derechos civiles, feminismo, visibilidad LGBTQ+.
Ejemplos:

  • X-Men: Una metáfora de la discriminación en todas sus formas.
  • Miles Morales (Spider-Man): Representación de diversidad racial y nuevas generaciones.
  • Kamala Khan (Ms. Marvel): Heroína musulmana que explora el choque cultural y la identidad.

📌 Impacto: Se redefinió quién podía ser héroe, ampliando la representación a diferentes géneros, razas y culturas.





🔮 4. ¿Quién es el héroe del futuro? (2020 en adelante)

Hoy en día, los héroes continúan evolucionando, y podemos identificar nuevas tendencias en su representación:

1️⃣ Héroes con problemas de salud mental y emocionales 🧠

  • Antes, los héroes eran infalibles, pero ahora son más humanos, frágiles y psicológicamente complejos.
  • Ejemplo: Moon Knight, que enfrenta el trastorno de identidad disociativo.
  • Ejemplo: Jessica Jones, que representa el trauma y el abuso.

📌 Refleja una sociedad más abierta a discutir la salud mental y el bienestar emocional.




2️⃣ Héroes activistas y luchadores sociales ✊🏽

  • Ahora los héroes no solo enfrentan villanos, sino problemas sociales como el cambio climático, la desigualdad o la corrupción.
  • Ejemplo: Black Panther, que representa la lucha contra el colonialismo y la identidad africana.
  • Ejemplo: Captain America (Sam Wilson), quien aborda el racismo y la justicia social en Falcon and the Winter Soldier.

📌 El héroe del futuro no solo pelea con puños, sino con ideas y movimientos sociales.


3️⃣ Héroes tecnológicos y digitales 🖥️

  • En un mundo donde la inteligencia artificial, el metaverso y la ciberseguridad dominan, los héroes ya no son físicos, sino digitales.
  • Ejemplo: Riri Williams (Ironheart), una genio de la tecnología que toma el manto de Iron Man.
  • Ejemplo: Cyberpunk y Ready Player One, donde los protagonistas se convierten en héroes en un mundo virtual.

📌 Los héroes del futuro serán expertos en datos, hacking y manipulación de la realidad digital.





4️⃣ Héroes cotidianos y antihéroes 🤯

  • Con la crisis de confianza en las instituciones, los héroes ahora son figuras ambiguas, moralmente grises y con códigos personales.
  • Ejemplo: The Boys y Peacemaker, donde los héroes tradicionales son corruptos y los protagonistas son antihéroes que desafían al sistema.
  • Ejemplo: Joker (2019), donde el villano es visto como un símbolo de protesta.

📌 La sociedad actual desconfía de las figuras de autoridad, por lo que los nuevos héroes son imperfectos y cuestionan las reglas.

Le pregunté luego por un análisis histórico alternativo, que no partiera de esa hipótesis mía y acerté en parte, y en otra fue diametralmente distinto.

Los Superhéroes como Reflejo de las Crisis y el Poder Social

Si bien tu análisis traza la evolución de los héroes a partir de los perfiles profesionales y sociales predominantes en cada época (periodistas, científicos, marginados, etc.), podemos hacer otro enfoque: cómo los superhéroes han encarnado los miedos y las crisis de cada generación, reflejando la transformación del poder y la justicia en la cultura popular.

En este análisis, veremos que los superhéroes no solo han sido símbolos de esperanza o justicia, sino también respuestas a los temores colectivos de cada época, desde la guerra hasta la era digital.


🦸‍♂️ 1. Héroes como defensores del orden en tiempos de guerra (1930-1950)

🔹 Crisis histórica: Gran Depresión, Segunda Guerra Mundial, temor al colapso económico y político.
🔹 Cómo se reflejó en los héroes: Se crearon figuras que representaban la autoridad y el orden, héroes inquebrantables que protegían la estabilidad de la sociedad.

Ejemplo: Superman (1938) – Un ser casi divino, protector de la humanidad, que encarnaba la fe en la justicia y el progreso.
Ejemplo: Capitán América (1941) – Un soldado convertido en supersoldado, luchando contra los enemigos del mundo libre (Nazis, Hydra).

📌 Análisis: En una época de incertidumbre global, los héroes surgieron como símbolos del orden y la estabilidad, asegurando que la civilización estaba protegida contra las fuerzas del mal.


☢️ 2. Héroes como respuesta al miedo nuclear y la Guerra Fría (1950-1970)

🔹 Crisis histórica: Carrera armamentista, Guerra Fría, paranoia por la destrucción global.
🔹 Cómo se reflejó en los héroes: Aparecieron personajes que simbolizaban tanto el peligro de la ciencia descontrolada como la idea de la evolución humana ante los nuevos desafíos.

Ejemplo: Hulk (1962) – Un científico víctima de la radiación, reflejando el miedo a la energía nuclear y la ciencia fuera de control.
Ejemplo: Los X-Men (1963) – Mutantes rechazados por la sociedad, reflejando el temor a los cambios evolutivos y los conflictos ideológicos.
Ejemplo: Iron Man (1963) – Un genio industrial convertido en guerrero tecnológico, representando el complejo militar-industrial y el auge de la guerra tecnológica.

📌 Análisis: En una era de paranoia nuclear y espionaje, los héroes se dividieron entre aquellos que advertían sobre los peligros de la ciencia y aquellos que representaban el control tecnológico sobre el caos.


🎭 3. Héroes como vigilantes en un mundo de corrupción y desconfianza (1970-1990)

🔹 Crisis histórica: Guerra de Vietnam, crisis política (Watergate), pérdida de confianza en el gobierno.
🔹 Cómo se reflejó en los héroes: Surgieron figuras más oscuras, vigilantes que no confiaban en las instituciones y actuaban bajo su propia moral.

Ejemplo: Batman (The Dark Knight Returns, 1986) – Un héroe más brutal, que desconfía del gobierno y ve a la ley como ineficaz.
Ejemplo: Watchmen (1986) – Un cómic que cuestiona la idea del superhéroe y lo muestra como una herramienta de control social.
Ejemplo: Punisher (1974) – Un exsoldado que toma la justicia por su cuenta, reflejando la ira y la desilusión con el sistema.

📌 Análisis: En un mundo donde las instituciones ya no eran vistas como confiables, los héroes dejaron de ser figuras idealistas y se convirtieron en vigilantes extremos o instrumentos de control del poder.


🌍 4. Héroes como íconos de diversidad e identidad (2000-2020)

🔹 Crisis histórica: Globalización, crisis migratorias, debate sobre identidad y representación.
🔹 Cómo se reflejó en los héroes: Se amplió la diversidad de los héroes, convirtiéndolos en símbolos de inclusión, resistencia y lucha contra la discriminación.

Ejemplo: Black Panther (2016) – Un rey africano con tecnología avanzada, símbolo de la identidad cultural y la lucha contra el colonialismo.
Ejemplo: Miles Morales (2011) – Un Spider-Man afro-latino que representa a una generación multicultural.
Ejemplo: Kamala Khan / Ms. Marvel (2013) – Una heroína musulmana que explora el choque entre tradición y modernidad.

📌 Análisis: Con el auge de la globalización y los movimientos sociales, los superhéroes dejaron de ser solo "guardianes del mundo" y pasaron a ser reflejos de las luchas y representaciones de grupos históricamente marginados.


🤖 5. Héroes como respuesta a la era digital y la IA (2020 en adelante)

🔹 Crisis histórica: Inteligencia artificial, control de datos, desinformación, cambio climático.
🔹 Cómo se refleja en los héroes: Los nuevos superhéroes enfrentan amenazas digitales y tecnológicas, donde el enemigo ya no es físico, sino informático o ambiental.

Ejemplo: Ironheart (2022) – Una joven ingeniera que usa la tecnología para enfrentar problemas modernos.
Ejemplo: Cyberpunk 2077 y Ready Player One – Historias donde los héroes luchan en mundos virtuales.
Ejemplo: Eternals (2021) – Héroes que cuestionan su rol en el destino del planeta y los conflictos morales de la inmortalidad.

📌 Análisis: Con el auge de la inteligencia artificial y el poder de las grandes corporaciones tecnológicas, los nuevos héroes representan la lucha por la autonomía en un mundo cada vez más controlado por algoritmos y datos.


📊 Conclusión: Los superhéroes como espejos de nuestros miedos y crisis

📍 Mientras que en el siglo XX los superhéroes eran figuras de orden y estabilidad, en el siglo XXI han evolucionado para representar las crisis de identidad, la resistencia contra el poder y la lucha contra el control digital.

📍 Hoy, los superhéroes no solo pelean contra villanos físicos, sino contra el miedo a la vigilancia, la desinformación, la desigualdad y el colapso ambiental.

📍 En el futuro, los héroes probablemente reflejarán las tensiones entre lo humano y lo artificial, la lucha por el control de la información, y el impacto de la tecnología en la identidad individual.

Industrial/sludge electrónico, death progresivo melódico brillante, post-punk jazz avantgarde chileno, grindcore misterioso y muchos singles/EPs geniales como el de Calva Louise

1. Was I Good Enought? (2025) de Intensive Care & The Body: distintas formas de industrial / power electronics / metal extremo que además de usar la aguda voz witch y fantasmal tiene growls, lo que le da más peso. Creo que aunque este género se está agotando para mí, el uso de una mayor variedad vocal y que hay una instrumentación más cercana a una calma post-metal y sludge, y no sólo drone y noise, le da un matiz más interesante, aunque creo que es muy largo y repetitivo, claramente, no es aburrido pero tampoco excitante. 3,3 de 5. Por ahora, hay que repetir.

2. Keys to the Palace (2025) de Dessiderium: esto sí es una maravilla, melodeath progresivo gringo (según Metallum) que amalgama viking, epic doom, power, sinfónico, black y thrash pero también interludios con voces reverberas, casi pop, en canciones largas, épicas, hiper arpegiadas, que intercambia tiempos y ritmos de formas muy creativas y de precisión igualmente brutal y quirúrgica, con una extraordinaria producción vocal, que combina amplísimas líneas de voces épicas entre lo vikingo y lo espacial, con agrios shrieks de black metal.

Quinto disco de la obra del multi-instrumentista Alex Haddad (guitarrista de Arkaik y de la actual alineación de Atheist) con al asistencia del baterista Brody Smith (Exist, Satyr) y el pianista Thomas Leroy Meier. 

Es una impresionante serie de temas que combinan guitarras complicadas y melódicas, entre el shred y el progresivo, que son rematadas por impresionantes arreglos ritmicos impulsados por una batería altamente detallista y un bajo en espirales sucesivas que se combina con amplísimos arreglosd e sintetizadores, entre lo ambiental y lo sinfínico, mientras todo suena al tiempo en laberínticos riffs de death técnico y metal progresivo, pero también hay largos interludios de rock progresivo, que no es psicodélico sino orquestal, que le da un aire casi de AOR que es refrescante, porque además está atravesado a veces por guturales y guitarras potentes, otras por violines y sintetizadores, otras por voces limpias y calmados pianos, que ofrece un paisajismo amplísimo, refrescante y asombroso, como si uno juntara Genesis con Wilderun. 

Joya, un candidato serio a disco del año, 4,8 de 5. 

3. La Brea (2025) de Hesse Kassel: según Sputnikmusic es post-rock, post-punk y math rock, y según se parece a Black Midi, pero eso se queda muy corto. El primer tema, postparto inicia como poesía narrada en español chileno, entre el art rock y la música experimental, con letras sobre identidad sexual, el existencialismo chocando contra las complicaciones de la vida cotidiana actual y algo de rabiosa disertación, que se va transformando en ese mix de géneros citados antes para más tarde convertirse en algo entre el jazz-rock, el art punk y citando a RYM también noise rock, progresivo de vanguardia y rock experimental. 

La banda chilena está conformada por Renatto Olivares (guitarra, saxofón, vocales), Luca Cosignani (guitarra, vocales), Mauricio Rosas (guitarra), Matthew Hopper (bajo), Eduardo Padilla (batería), Joaquín González (teclados y coros).

Luca y Mauricio tocan también en Cóclea y Renatto y Mathew en Canut de Bon, bandas del split de noise/screamo/post-hardcore No esperan por nadie. Ahora entiendo porqué tantos discos argentinos, chilenos y uruguayos están tan bien punteados en RYM. Me parece súper interesante, mucho mejor producido que el split y composiciones avanzadísimas, pero el spoken word le quita muchísimo peso, le da un aire conceptual excesivo y más post-punk tradicional que lo que me gusta, y donde La Vida Boheme son sublimes. 

Así mismo, los temas y/o extensas partes instrumentales, especialmente las que combinan jazz-rock, post-hardcore y progresivo son realmente poderosas, interesantísimas y geniales. Difícil de puntuar porque es muy diferenciado entre temas, con una segunda mitad muy buena, y un tema final que además remató como si fuese un álbum de Full Of Hell, fascinante en ese sentido. Puedo irme con un 4,2 de 5. 

4. Final Salughter (2025) de Insect Warfare: después de unos singles y un EP regular, sale este nuevo álbum de la banda de grindcore / death de Texas. Súper primitivo, básico y salvaje. Un regreso misterioso después de casi 12 años desde un split con Napalm Death. Tiene un miembro y un exmiembro de Oceans Of Slumber. Le puse 3,5 al EP. Me quedo con una mirada similar, e incluso un poco menos porque sigue siendo consistentemente de mala calidad y repetitivo.

5. V 5en5e5 (Ep, 2025) de Sad Eyes: deathgrind español, con momentos progresivos y otros de brutal death, proyecto cuasi-solitario de Santi Gzlez.

6. El EP de Calva Louise es genial, no sólo por los arreglos progresivos de teclado y guitarra, sino por los grunts de Jess Allanic y el sonido industrial de las guitarras (y un cuatro, más expresiones venezolanas en las letras en inglés y español). Deerhoof, qué locura hacer indie rock y noise tan demencial y experimental. Los dos singles de Panzerballett, con jazz/metal, funk/ska y progresivo están alucinantes como el nombre de uno de los temas Alien Hip Hop. Dead Weight de Blindside me encantó, con esa mezcla de post-hardcore y nu-metal. Los dos singles nuevos de Cómo Asesinar a Felipes, con invitados para hacer rapmetal/jazz-rap llegan a niveles superiores. Mantra con su tercer single de 15 minutos, que me recordó a Wilderun. Liv Kristine y Novelists, con dos formas distintas del metal femenino, gótico y brutal, o moderno y cadencioso. Los de ...And Oceans están terroríficamente buenos, sorprendentes, industriales y casi post-black pero muy oscuros. 

20 marzo 2025

Sludge/stoner por montones, metal sinfónico muy operístico y metal alternativo industrial de LA, deathgrind de San Francisco,

1. Deep Cuts (2025) de Red Fang: compilado de la banda de stoner y sludge metal / noise rock / hardcore punk. Me gustó muchísimo el recorrido y ahora quiero escuchar toda su discografía. 4,3 de 5.

2. Black Is the Colour (2013) de Arven: segundo y último de esta banda alemana y mayoritariamente femenina de metal sinfónico, muy operístico, pero es particularmente bueno porque hacen un power metal sinfónico que usa una combinación de composición sinfónica, folk metal y guitarra clásica para hacer arreglos de progresivo con contratiempos y ritmos extraños, lo que también se traslada a la voz principal de soprano, que gira entre la usada en el metal, la más operística y otras técnicas de metal mientras la bajista, las guitarristas y la tecladista/corista hacen giros progresivos, preciosistas y hasta medievales, combinando instrumentos clásicos y de rock. Más rockero que Therion y menos orquestal que Haggard o que Épica, es más amalgamado en su propuesta musical. Lástima que no siguieron, la mayoría ni siquiera supe si siguieron en el metal. Buenísimo, 4,6 de 5. 

3. The Dark EP (2025) de The Dark, banda de Los Angeles de metal alternativo, industrial, metalcore y algo de electrónica. Un poco de muchas cosas que tiene buenos momentos, casi como Knocked Loose por momentos. 4 de 5. El nombre no ayuda a ubicar demasiada información sin que se confunda con otras bandas del mismo nombre. Bien noventeros, tomando de clásicos del industrial de esa época más algo de nu-metal.


4. Tales from the Entrails: A Necrology (EP, 2025) de Cartilage: deathgrind de baja calidad de sonido pero buenas canciones, rápidas, locas, extremas y con muchos guturales, algo de arreglos punk y noise. Cortísimo. Agradablemente extremo, aunque debería tener mucho mejor sonido. 3,7 de 5. Son de Sa Francisco, California.


19 marzo 2025

Djent/progtresivo checo, black melódico vikingo sueco y sinfónico suizo, heavy folk sinfónico español, sludge suizo, chamber pop de NY, power progresivo canadiense, metal alternativo sueco

1. Travelers (2013) de Modern Day Babylon: djent/progresivo de Chequia con sonidos electrónicos de space ambient, bastante matemático, potente, groovy y retador, aunque no es especialmente innovador sí es súper técnico. Se parece a Plini y a The Helix Nebula. 4 de 5. Uno de sus miembros es Jakub Zytecki, que hizo un disco solitario del género bastante bueno.


2. Sól Tern Sortna (2025) de Istapp: black metal vikingo que alterna entre momentos de riffs disonantes y misteriosos con un shriek genial que suena entre industrial y monstruoso, fondos sinfónicos tenebrosos y detallados arreglos instrumentales, casi progresivos y un viking black con coros limpios, riffs de power metal y black melódico. Una ambivalencia que se combina a veces en los mismos temas. Entonces a veces suena a Vintersorg y Enslaved otras a Dark Funeral, Naglfar o Taake. Increíble, con toques paganos, ritualistas y muchísimas melodías a punta de violines y teclados ambientales/sinfónicos. Entre los varios invitados están los cantantes de Night Crowned y Nebelkrähe.

3. Celestial Decay (2009) de Atritas: black metal sinfónico y melódico pero furioso y oscuro, con un shriek hiper agudo, un sonido potente y atmosférico aunque transparente, más algunos riffs disonantes y algunas influencias del death melódico de los 90. 

Un discazo quizás poco conocido pero definitivamente influyente en el death/black sinfónico contemporáneo, pues combina la herencia de la batería súper potente y presente del black noruego sinfónico de los 90 como Satyricon y Emperor con riffs melódicos en trémolo picking acompañados de amplios sintetizadores acompañantes como los comienzos de Dimmu Borgir, Anorexia Nervosa y Hecate Enthroned. Comparten baterista con Schammach. 4,5 de 5.

4. El Principito (2025) de Saurom: este disco de la banda de folk/heavy español me pareció demasiado aguado y comercial. Según RYM es porque al power sinfónico con toques de folk usual, ahora se le sumaron AOR y hard rock. Básicamente me perdieron. 3,3 de 5. A pesar de tener muchísimos invitados y músicos folk/sinfónicos, la mayoría de los temas rayan en la power ballad, incluso en versiones radiales demasiado inofensivas. Por suerte, al final está una gran excepción, El mordisco de la serpiene, con grandes coros épicos, riffs thrashosos y muchísima más potente metal sinfónico.

5. Zatrokev / Vancouver (2007, split): genios suizos del sludge se juntaron para presentar canciones furiosas, dementes y fangosas, uno más death/doom y otro con metalcore/screamo/post-hardcore. Buenísimo, 4,6 de 5.

6. Bank On (Ep, 2025) de Dirty Projectors: cinco canciones de chamber pop y neo-psicodelia, donde combinando sonidos de los 50, cellos y trumpetas, se hace algo que parece estar en la encrucijada entre el soundtrack, la música de cámara, el indie folk y el art pop alternativo. Es bello, confuso e intrigante, de forma muy elegante. Es adelanto del próximo disco, Song Of The Earth, del cuarto de Nueva York.

7. Abalone EP (2025) de Panthalassan: un power progresivo canadiense bastante gótico y oscuro, con solos shreds, una batería elaborada y súper veloz, y bastantes influencias del viking metal. La voz limpia solista es un poco floja, pero los coros bastante buenos. Igual los arreglos de sintetizadores y de arpegios con repiques a alta velocidad, con fondos orquestales de metales. Tienen potencial.

8. Singles increíblemente buenos de Caliban (con invitados de deathcore) y Sicksense (metalcore progresivo / trap metal / rock electrónico con voces femeninas limpias y growls muy buenos).

9. The World Was Never Enought (2025) de Days Of Jupiter, suena a una versión más hard rock y alternativa de Evergrey, especialmente por su cantante. Es realmente bueno este disco, con una base en el metal progresivo hay momentos de rock alternativo, de industrial, de djent, de metalcore, pero presentado de forma tan melódica, moderna y digerible que conquista y conquista con buenos sabores y capas de instrumentación cuidadosa, una producción realmente magistral y potentes sonidos de guitarras, que son realmente complejas y sorprendentes, así como groove y apetecibles.

10. Feelings of Nausea (2025) de Gore Temptations: metalcore melódico brasileño con un sonido duro, algunos momentos de melodeath e incluso de death técnico y thrash progresivo, que Metallum amable y algo exageradamente llama Progressive Death/Thrash/Groove Metal. 

Con un sonido claramente influenciado por el Sepultura más groove, el metalcore de Lamb Of God y las disonancias más propias de Converge, están más cerca del thrash/groove con una batería totalmente hardcore y algo d-beat incluso, una voz con pitch alto y rasgada pero no extrema salvo algunos gritos específicos y aunque los guitarras tienen sublimes momentos de solos y arpegios, la mayoría de los arreglos rítmicos y riffs están en la estructura del metal moderno. Me gustó, aunque no me encantó, 3,8 de 5.